Aunque el gobernador socialista la rechazó, el cronograma electoral que fijó deja la puerta abierta para un futuro acuerdo
La Provincia citó a trabajadores y directivos de Donnelley y busca resolver el conflicto Robin Williams: la historia de excesos y depresión que desencadenó en su muerte
Decidido a invertir sus últimos meses en el poder para evitar que Daniel Scioli sea presidente, el secretario Legal y Técnico, Carlos Zannini, se convirtió en el principal defensor en el núcleo duro kirchnerista de la candidatura presidencial de Florencio Randazzo.
Incluso, hace dos semanas le ofreció al gobernador socialista de Santa Fe, Antonio Bonfatti, la candidatura a vicepresidente de una fórmula encabezada por el ministro de Transporte, según revela La Plítica Online.
Randazzo tiene una excelente relación con Bonfatti y con la también socialista intendenta de Rosario, Mónica Fein, a quien sedujo con diversos proyectos de su cartera, como el regreso del tren a la ciudad más importante de Santa Fe. Excusa por la que suelen reunirse seguido, relata el portal.
Sin embargo, Zannini estuvo cerca de hacer un papelón para un hombre que transita por el nivel político que hoy recorre: Bonfatti rechazó el ofrecimiento. En ese nivel este tipo de propuestas sólo se hacen cuando se ha sondeado de manera adecuada al objetivo y se tiene la certeza que aceptará.
No obstante, todavía no está dicha la última palabra. Bonfatti, curiosamente apenas unos días después del ofrecimiento, definió el calendario electoral de Santa Fe y fijó las elecciones de gobernador para el próximo 14 de junio, una semana antes de la presentación de candidatos para las primarias presidenciales.
La decisión en los círculos políticos informados del ofrecimiento fue interpretada como un gesto de Bonfatti a la Casa Rosada. "Dejó la puerta abierta para volver discutir el tema el año que viene. Si Unen estalla y no se presenta en la presidencial, Bonfatti podría reevaluar el ofrecimiento de Zannini", afirmaron a LPO fuentes al tanto de las conversaciones.
La idea de sumar a Bonfatti es funcional a Zannini y Randazzo por dos lugares. Primero porque le sumaría al esquema electoral del ministro de Transporte nada menos que Santa Fe, precisamente una provincia donde hoy Scioli directamente no tiene candidato.
Y en segundo lugar viene a consolidar el perfil que Zannini imagina para el candidato del kirchnerismo "alternativo" a Scioli. El secretario Legal y Técnico quiere que el ministro de Transporte sea la expresión que represente a todos los sectores del kirchnerismo no peronistas o más distantes del PJ tradicional, como él mismo; La Cámpora; Nuevo Encuentro de Martín Sabattella y otras expresiones menores.
Sumar a los socialistas de Santa Fe reforzaría esa idea de "transversalidad progresista" que tanto seduce a Zannini y porque no, también a Cristina Kirchner.
Comentá la nota