El responsable del área de Desarrollo Local del Municipio comentó que dada la situación epidemiológica en el distrito resulta difícil creer que los bares y restaurantes tengan responsabilidad en la propagación de contagios, dado a su cierre preventivo desde hace 15 días.
Wuiovich afirmó que mantuvieron una reunión con propietarios de locales gastronómicos, quienes les plantearon su situación, encuentro que resultó en las medidas que se tomaron hace casi dos semanas de permitir los deliverys y el take away.
“En lo personal creo que no hay mucho margen para seguir restringiendo las posibilidades laborales. Los bares están cerrados hace 40 días y los contagios siguen, ya no creo que tenga que ver con una responsabilidad de ese sector”, dijo.
En ese sentido dijo que no quedan más alternativas que apelar a la conciencia ciudadana y social para que los contagios no se propaguen, y que en todo caso se deberán reconfigurar los bares y restaurantes para que trabajen con otra modalidad y con el cumplimiento debido de los protocolos.
Wuiovich recalcó que muchas personas y familias viven de lo que generan esos comercios, y que no pueden más. Incluso citó que a varios la empresa de Gas les envió el aviso de corte por impago, algo que también duele, dijo.
A modo de autocrítica, el funcionario dijo que en la primera apertura realizada cuando la ciudad estaba en fase 5 “nos faltó firmeza a la hora del control y del cuidado de los protocolos”, y afirmó que dependerá de un nuevo compromiso de que no vuelva a pasar que puedan volver a la actividad pronto.
Por otro lado, Wuiovich expresó que la intención del intendente Salomón es la de trabajar en equipo junto con todos los sectores políticos e institucionales en la toma de decisiones, muchas de las cuales fueron por unanimidad, aunque luego los palos o las quejas se las lleve el Municipio.
Pese a ello, dijo que en algún momento la pandemia va a pasar y la historia juzgará a quienes fueron los que estuvieron al frente siempre, poniendo el pecho y dando respuestas, y a quienes se quedaron escondidos, “yendo de la casa a la oficina pública donde trabajan, cobrando un buen dinero por mes y habiéndole dicho al pueblo durante una campaña que iban a gastar alpargatas recorriendo Saladillo y después se quedaron guardados”.
En ese sentido afirmó que especular en estos tiempos y buscar sacar provechos políticos “es muy miserable”, y que el estilo de “buscar consensos, dialogar, de la apertura y convocar a todos” del intendente Salomón “debe venir para quedarse”.
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