Por Gustavo Valdez

De todos los homenajes que se sucedieron el 27/10 último, cuando se conmemoró el aniversario N°12 del fallecimiento de Néstor Kirchner, tal vez haya sido el de Eduardo 'Wado' de Pedro el que más honor le hizo a la memoria del exPresidente, en especial el de la última etapa. Al incriminar al diputado opositor Gerardo Milman de tener conocimiento de que Cristina Kirchner iba a sufrir un atentado contra su vida, el ministro del Interior y hombre de la Vicepresidente en el Gabinete retrotrajo a aquel Kirchner que amplificó sospechas sobre Francisco de Narváez, quien en 2009 estuvo involucrado en una causa por el tráfico de efedrina. Tanto Kirchner como de Pedro perseguían un efecto electoral. El expresidente iba a disputar una elección ese mismo año contra el empresario. De Pedro, en tanto, buscó complicar a Juntos por el Cambio, que es la fuerza de mayor competitividad actualmente. Cualquier encuesta muestra que el principal espacio opositor le ganaría al oficialismo si los comicios fueran hoy.

Como Kirchner, de Pedro basó su acusación en un artículo publicado por el diario oficialista Página12. El mismo informó que un testigo declaró ante la jueza María Eugenia Capuchetti y el fiscal Carlos Rívolo que oyó a Milman decir “cuando la maten (a CFK), yo voy a estar camino a la costa”. El testigo en cuestión, según informó el portal Infobae, es el exdiputado provincial de Santa Fe Jorge Abello, quien hoy se desempeña -como contó Página12- como colaborador del diputado nacional por la misma provincia y dirigente de La Cámpora, Marcos Cleri. Según relató a la Justicia, Abello escuchó a Milman hacer tal comentario en el café Casablanca, lindante al Congreso, donde el diputado de JxC se encontraba junto a 2 colaboradoras, mientras el testigo almorzaba con su cuñado. Tras el atentado, Abello relacionó un hecho con el otro y le envió a Cleri un mensaje de Whatsapp en el que lo ponía al tanto del episodio en Casablanca. Según infobae.com, esa conversación no está en el expediente. La presencia de Milman en el momento y en el lugar fue confirmada por las filmaciones de las cámaras de la zona. Las colaboradoras prestaron declaración testimonial y negaron que Milman hiciera tal comentario. El diputado opositor, por su parte, confirmó en declaraciones públicas que estuvo en el partido de Pinamar, en la costa bonaerense, después de aquella reunión en Casablanca. En tribunales, en tanto, rechazó la imputación del testigo y lo denunció por falso testimonio.

Hasta ahora Milman no fue imputado. Sin embargo, al ministro de Pedro le resultó más que suficiente lo publicado en Página12 para afirmar sin ningún tipo de hesitación que el diputado del PRO tenía conocimiento previo de que la Vicepresidente iba a ser atacada, lo que lo convertiría cuanto menos en un encubridor. “Gerardo Milman sabía que la iban a matar a Cristina Kirchner, es gravísimo”, afirmó en una entrevista que le hizo El Destape. Kirchner, al menos, le había dado el beneficio de la duda a de Narváez cuando le insistía en que se presente a la indagatoria, a lo que el entonces diputado se resistía. Lo taxativo de la declaración del ministro choca contra la presunción de inocencia, que es un derecho constitucional por el que un funcionario de la jerarquía de de Pedro debería velar. Esto no quita que la Justicia deba agotar todas las líneas de investigación para esclarecer el atentado que sufrió la Vicepresidente. En qué quedará el episodio de Milman y el testigo es algo que dependerá de la Justicia. Sobre aquel caso de de Narváez con la efedrina la historia es conocida: el diputado le ganó las elecciones a Kirchner, el juez que pidió su indagatoria fue destituido, y la cuestión quedó rotulada para siempre como una “campaña sucia”.

Todo PASO

De Pedro no sólo apuntó a Milman. Parte de su acusación consistió en un hilvanado que pasó por Patricia Bullrich y llegó hasta Mauricio Macri. Hace tiempo que el oficialismo trata, sin éxito, de vincular al macrismo con el atentado, lo que tiene, por supuesto, un trasfondo electoral. La debilidad que tiene el frente de todos en esa materia lo obliga a recurrir a diferentes maniobras para potenciar sus posibilidades, a la luz de la encuestas, escasas. La principal es el intento de eliminar las PASO, una herramienta que en la oposición consideran vital para dirimir sus diferencias internas, cada vez más profundas, y resolver las candidaturas. Entró a la Cámara de Diputados finalmente esta semana un proyecto de ley que había sido ampliamente promocionado para eliminar las elecciones primarias. Se trata de una iniciativa del diputado rionegrino Luis Di Giácomo, de un bloque aliado al oficialismo. El texto no es del Frente de Todos, pero el ministro de Pedro le dijo a El Destape que el sentir mayoritario dentro de la coalición de gobierno es por la abolición de las PASO y que, en todo caso, al único que falta convencer es al Presidente.

lberto Fernández reivindicó defendió las primarias al mismo tiempo en que su proyecto reeleccionista consigue adeptos, como el camionero Hugo Moyano, que viene de conseguir una paritaria del 107% para su gremio. La cuestión de las PASO también abre una grieta dentro del propio oficialismo. Fernández sabe que una interna es la última carta para que su ilusión reeleccionista tenga algún viso de realidad. Máximo Kirchner le respondió que ningún Presidente compite en primarias, y recordó que él nunca estuvo de acuerdo con la decisión de su madre, la Vicepresidente, de postularlo como cabeza de fórmula. Si no prestó acuerdo aquella vez, mucho menos lo haría ahora, enemistado con el Presidente. El hijo de Cristina Kirchner además puso en duda que ella finalmente sea la candidata a Presidente el próximo año. Habló del desgaste que significa un nuevo mandato, pero también dejó traslucir las dificultades competitivas que podría afrontar la exPresidente. Dijo que de haber sido candidata en 2019, habría ganado. No hizo una referencia similar sobre la actualidad. Sin embargo, hay un ‘operativo clamor’ para que CFK asuma el desafío de representar al peronismo en las elecciones del próximo año. Uno de los que empuja esa empresa es Axel Kicillof. Aunque no se sabe si lo hace por un interés real de que la Vice sea candidata o por una estrategia defensiva para que no lo elijan a él como postulante presidencial. Kicillof quiere reelegir como gobernador de la provincia de Buenos Aires.

Van 2...

Cristina Kirchner, por su parte, reapareció para impugnar el aumento en el valor de las cuotas que el Gobierno les autorizó a las prepagas. A la Vicepresidente le resultó “francamente inaceptable” el ajuste de 13,8% que podrá aplicar la salud privada. Más allá de los cruces con las empresas del sector, el mensaje de CFK vino a eclipsar el festejo de Sergio Massa por la media sanción del proyecto de Presupuesto en la Cámara de Diputados, algo que además contribuyó a la crisis opositora. La ‘ley de leyes’ obtuvo un amplio acompañamiento. Hasta Máximo Kirchner prestó su voto a pesar de que no colaboró para el quórum y de que el texto está cimentado en el acuerdo con el FMI al que él se opuso. La queja de la Vicepresidente, que en el fondo discute la política de precios, es la 2da de la era Massa. De todos modos no faltaron las suspicacias sobre si el corazón de la crítica no apuntaba a las relaciones empresariales del ministro de Economía.

Resulta francamente inaceptable el nuevo aumento, esta vez de dos dígitos (13,8%), que el Gobierno autorizó a las empresas de medicina prepaga, y que de esta manera suman el 114% anual de aumento otorgado. O sea, más de un 20% sobre la inflación anualizada.

— Cristina Kirchner (@CFKArgentina) October 26, 2022

Bálsamo

En este clima en el que la interna oficialista no cesa y la expectativa electoral es cada vez más nubosa, en el Frente de Todos esperan que una suerte de bálsamo se produzca este domingo en Brasil, donde Lula da Silva y Jair Bolsonaro se disputarán la Presidencia en un histórico balotaje. El Gobierno espera festejar una victoria de Lula que le inyecte ánimo. La última encuesta de la consultora Genial/Quaest, como otras que se conocieron hasta el momento, le da ventaja pero por primera vez en su línea histórica ubica el resultado en la franja del empate técnico. Lo más probable parece ser una victoria del líder del PT, pero con el desempeño que Bolsonaro mostró en la primera vuelta y que las encuestas no pudieron predecir, hay una sensación de moneda en el aire que dificulta aventurar un resultado preciso. No vaya a ser cosa que en ese tema en el Frente de Todos también se queden con las ganas.