El gobierno anunció un programa para que los referentes de iglesias que tienen más de 60 años puedan acceder a una vivienda y tengan cobertura del Ipross.
El voto de los fieles de las iglesias evangélicas está en plena disputa en Río Negro. El candidato a diputado por Juntos por el Cambio, Aníbal Tortoriello, tiene afinidad con el sector, porque forma parte desde hace años de la comunidad católica de Cipolletti. Ante esa cercanía, el oficialismo provincial salió a jugar fuerte, con la incomparable ventaja que ofrece la chequera del Estado. Y el primer gesto fuerte se vio esta semana, cuando el gobierno comprometió millones de pesos para que los pastores mayores de 60 años puedan tener una casa y cobertura de la obra social Ipross.
El acto en el que se firmaron los acuerdos se hizo el miércoles en Jacobacci, encabezado por la gobernadora, Arabela Carreras, pero también con la presencia de las candidatas a diputadas por Juntos, Mercedes Ibero y Marcela Ávila.
El presidente de la Asociación de Pastores de Iglesias Evangélicas de Río Negro (APIER), Fabio Huenchunao, fue el otro protagonista, representando a los referentes de los más de 1.000 templos que funcionan actualmente en la provincia.
Ese volumen de iglesias no deja dudas sobre las razones que tiene la política para acercarse a los pastores. Se trata de la puerta de acceso a miles de rionegrinos y en tiempos electorales, captar esos votos es uno de los objetivos importantes.
Huenchunao negó esa vinculación electoral cuando dialogó ayer con RÍO NEGRO, pero lo concreto es que logró beneficios a los que pocos sectores acceden.
El gobierno provincial aportará todos los materiales que sean necesarios para construir las casas de los pastores mayores de 60 años que no tengan un inmueble propio y además abrirá las puertas del Ipross para que cuenten con obra social a través de un “mínimo aporte”.
En la gacetilla oficial que se difundió el miércoles, la gobernadora Carreras estimó que “hay unos 550 pastores y pastoras para acceder al beneficio” en la provincia, aunque el titular de la APIER aseguró ayer que ese no era el número de referentes que tendrán una nueva vivienda. Cuando RÍO NEGRO le preguntó cuántos eran, se excusó indicando que recién está empezando el relevamiento que definirá el listado de beneficiarios.
Desde el Ejecutivo se aseguró que “el proyecto busca dar continuidad a la planificación y diseño de políticas públicas en materia habitacional que lleva adelante el Gobierno en toda la provincia, en el marco del programa RN Suelo Urbano y a través de un trabajo articulado entre el IPPV y los Ministerios de Gobierno y Comunidad, de Desarrollo Humano y Articulación Solidaria y de Economía”.
Luego se precisó que para esta línea, “el Estado definirá los criterios de accesibilidad y otorgará los materiales para la construcción, certificando avances de obra y renovando insumos hasta la finalización de la unidad funcional. Por su parte el beneficiario, aportará la mano de obra”.
Huenchunao detalló ayer que esas construcciones estarán a cargo de “los hermanos de la iglesia” y que los pastores deberán aportar el terreno para la edificación.
“Son viviendas de 30 metros cuadrados en una primera etapa. Es un modelo a replicar en cada localidad de la provincia”, complementaron desde Provincia.
"Brindamos acceso a la vivienda para más de 500 pastores que están en su etapa de retiro. Es en retribución al trabajo con la comunidad que han hecho durante estos años." - Arabela Carreras
Huenchunao: “Un pastor vive de changas”
El pastor Huenchunao agradeció en Jacobacci “la enorme puerta que la gobernadora ha abierto a todas las Iglesias Evangélicas de Río Negro”.
“Hoy tenemos un lugar para ir, sentarnos y ser escuchados, para gestionar y lograr cosas que nunca se habían podido lograr, como estar hoy aquí en una de las reuniones más importantes de todas las Iglesias Evangélicas”, agregó.
Ayer RÍO NEGRO entrevistó al presidente de la Asociación de Pastores de Iglesias Evangélicas, quien negó haberse prestado para un acto con fines electorales.
P: ¿Cómo surgió este programa de vivienda?
R: El pastor pasa la vida pastoreando. Vive en el lugar que les da la iglesia. Cuando llega a una edad o queda viudo, se encuentra que pastoreó toda la vida y nunca accedió a la casa. Entonces nos encontremos con varios que llegan a 60 años y nunca llegaron a tener la casa propia.
P: ¿Y no creen que la respuesta del gobierno tiene un interés electoral?
R: No lo miramos como un tema electoral. Yo como presidente gestiono, veo las necesidades del pastor. Hay muchos que critican, pero no ven las necesidades, por ejemplo, la falta de obra social. Estamos viviendo un tiempo muy difícil. No tenemos un sueldo. Lo electoral será un trabajo político. Ellos lo harán a su manera. Mi deber es gestionar y que los pastores sean escuchados.
P: ¿Y de qué viven los pastores?
R: Un pastor vive de changas. Algunos son carpinteros, otros albañiles, otros ponen un negocio, un kiosco, pero hoy la situación no da para que tengan una vivienda.
P: ¿Cuántos pastores tendrán casa a través de este programa? Se habla de 550…
R: No creo que sean tantos. Recién a partir de ahora se comienza a evaluar quiénes son. Será para los que no tengan nada a su nombre, los que no tienen vivienda. El Estado pondría los materiales y la asociación pone la mano de obra. Ellos tendrían que tener el terreno.
Una erogación total superior a los 550 millones de pesos
Si bien no fueron entregados los datos oficiales por parte de esta organización religiosa, se estima que existen en Río Negro alrededor de 550 pastores evangélicos.
Tomando la hipótesis de máxima, es decir, considerando que ninguno de ellos tenga hoy en día vivienda propia y sea el Estado el que deba ayudarlos con el programa propuesto por la gobernadora Arbela Carreras para contar con ella, la partida de los fondos que se deberían destinar para cumplir con ese objetivo estaría en poco más de 550 millones de pesos.
La cifra se obtiene de contemplar el gasto promedio en el que debe incurrir el Estado para poner en pie hoy unas 550 viviendas, sin incorporar en este monto el costo del terreno ni la mano de obra para su construcción.
Desglosando los valores esto significa que el Estado destinaria un promedio de poco más de un millón de pesos por cada unidad de 30 metros (unos 35.000 pesos por metro cuadrado).
El cálculo es el siguiente: para este este tipo de unidad (estilo plan de vivienda) el costo por metro cuadrado (sin computar terreno) se lo ubica en los 54.000 pesos promedio. El 35% de este valor corresponde a mano de obra por lo que el Estado solo se hace cargo de unos 35.000 pesos por metro cuadrado a construir.
Obviamente, la estructura de costos tenderá a modificarse con el paso del tiempo por los elevados niveles de inflación que arrastra el país. En la medida que los precios sigan subiendo, como lo vienen haciendo hasta ahora, la obra se encarecerá especialmente en todo lo que son materiales para la construcción, ya que los salarios que se contemplan para la mano de obra tenderán a licuarse en este escenario.
Otro dato para considerar: las 550 viviendas prometidas por la gobernadora no es un número menor teniendo en cuenta que, para el año en curso, el Estado Nacional otorgó a la provincia de Río Negro un cupo para construir 1.300 viviendas.
El acceso a la obra social
Además del programa de vivienda, en Jacobacci se firmó un convenio para que los miembros de la Asociación de Pastores puedan acceder como afiliados adherentes voluntarios a la obra social del Estado rionegrino.
Ese momento del acto tuvo como protagonistas a la gobernadora Carreras, al pastor Huenchunao, pero también al presidente del Ipross, Alejandro Marenco.
Un dato a tener en cuenta es que Marenco también es pastor, dentro del Ministerio Dios es Fiel.
“Hoy firmamos este convenio, para ser adherentes a la mejor obra social que hay hoy en Río Negro, que se llama Ipross y que ha sido tan bien ordenada por su presidente. Una obra social que incluye a todos, no deja a nadie afuera y que tiene el respaldo del Estado rionegrino”, lo valoró Carreras.
Huenchunao dijo ayer que contar con obra social era muy importante “porque muchos padecieron coronavirus y quedaron mal”.
Cuando se le preguntó cuánto aportarán al Ipross, dijo que “se está trabajando para definir la cobertura”, pero anticipó que será “un mínimo”.
¿Es constitucional?
El Estado de Río Negro profesa la libertad de culto.
En su artículo 28, la Constitución establece que “…la provincia no dicta ley que restrinja o proteja culto alguno aun cuando reconoce la tradición cultural de la fe católica..."
Por eso ayer profesionales del derecho consultados por RÍO NEGRO advirtieron que “ese tipo de selección de grupo (pastores de más de 60 años) es totalmente discriminatorio y arbitrario”.
En ese sentido, se recordó que cuando el Estado hace distingos, es porque busca proteger un grupo en franca desigualdad estructural que el resto. Un ejemplo concreto lo dio el mismo gobierno provincial, con el último plan de 22 viviendas inauguradas en Roca, adjudicadas a familias con personas con discapacidad y a mujeres víctimas de violencia.
“Nunca una condición de fe es un factor de desigualdad estructural en el que el Estado deba hacer una acción positiva. Tranquilamente, cualquier persona que integre uno de esos grupos podría cuestionar la constitucionalidad de esa medida”, precisó la fuente, que se desempeña en el ámbito judicial.
Una historia con quiebres por “traición”
La búsqueda de votos a partir de los beneficios para las iglesias evangélicas tiene una frondosa historia en Río Negro.
Ese camino tiene punto de partida en la década del 90, cuando el radicalismo era imbatible en las elecciones provinciales.
Más adelante en el tiempo, el exgobernador Alberto Weretilneck heredó esa lista de contactos en los templos y fortaleció la presencia territorial de Juntos Somos Río Negro de la mano de los pastores.
Pero hubo un quiebre. El senador votó a favor para la sanción de la ley del aborto y más de uno se sintió traicionado en el ámbito de las iglesias.
Ahora Carreras busca reconstruir lazos, a partir de un trabajo que encomendó meses atrás al ministro de Desarrollo Humano y Articulación Solidaria, Juan José Deco.
El camino no es sencillo porque en el tablero electoral emergió Aníbal Tortoriello, empresario con muy buena llegada a los sectores religiosos. El candidato de Juntos por el Cambio fue educado en un colegio salesiano de Neuquén y coordinó durante algunos años los encuentros matrimoniales que organiza la iglesia católica en Cipolletti.
De todas maneras, Tortoriello también libra batallas internas para contener las adhesiones que llegan desde las iglesias. La polémica pública con la radical Lorena Matzen fue por la misma razón que complicó al oficialismo provincial: la diputada votó a favor de la ILE y el candidato le pidió que baje su exposición en la campaña, para no enemistarse con los pastores y perder adhesiones “celestes”.
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