Concluido el escrutinio de las elecciones primarias del pasado 9 de agosto, el dato sobresaliente es que, más allá del claro triunfo del FPV sobre el FCS, el voto en blanco obtuvo más sufragios que el F3P (barrionuevismo), arañando casi el 12%, convirtiéndose así en una hipotética tercera fuerza.
Es más, si el resultado se repitiera en las generales de octubre, esta teórica fuerza, obtendría nada más y nada menos que 4 diputados provinciales, contra los 9 del FPV, 6 del FCS, y 1 de F3P.
Pero el voto en blanco también se hizo notar con fuerza en la categoría diputados locales, donde más de 40.000 electores prefirieron no votar a ninguna fuerza. Quedó claro que la oferta de nombres de ambos frentes, no sedujo a los ciudadanos en general.
En lo que respecta a los números finales por alianzas, en la categoría Gobernador, el FPV obtuvo más de 100.000 votos, contra los 77.000 que sacó el FCS. Así, la diferencia definitiva a favor de la gobernadora Lucía Corpacci fue de 23.000 sufragios sobre Eduardo Brizuela del Moral (Frente Cívico y Social).
Otro punto a destacar que dejó el escrutinio, es que el corte de boleta se dio en mayor medida en la categoría diputados provinciales, donde el FPV tuvo un corte de alrededor de 6 mil votos, y el FCS más de 8 mil.
En la Capital provincial, el intendente Raúl Jalil se quedó con una diferencia a favor de poco más de 5 mil votos, respecto de la suma de los tres postulantes que llevó el FCS. En esta pulseada Raúl Giné obtuvo 10.500 votos (será el candidato del FCS), contra 9.800 de Ricardo Guzmán, y 9.700 de Simón Hernández, produciéndose casi un empate técnico entre estos dos últimos pre postulantes.
Para culminar, se registró una participación del electorado de casi el 77% del padrón, cifra que no sólo refuta el análisis del FCS, desde donde se indicó que poca gente había concurrido a las urnas; sino que además representa el porcentaje histórico en la provincia.
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