Diputados de Juntos por el Cambio, del Frente de Todos y de Interbloque Federal presentaron un proyecto para reducir de manera progresiva los productos plásticos de un solo uso con el fin de dar respuesta a los problemas de contaminación ambiental.

El proyecto fue redactado por la diputada radical Brenda Austin y fue firmado por el presidente de la comisión de Recursos Naturales, el diputado del Frente de Todos, Leonardo Grosso; sus pares Florencia Lampreabe, Daniela Vilar y Camila Crescimbeni, y los socialistas Enrique Estevez y Luis Contigiani.

La iniciativa fija presupuestos mínimos de protección ambiental para la “regulación, reducción, sustitución y prohibición de manera progresiva de productos plásticos de un sólo uso”.

Además, se establecen plazos progresivos de prohibición para la entrega, ofrecimiento a la vista, importación, distribución, comercialización y producción de los productos alcanzados, que llegan a los tres años.

El texto prevé, además, excepciones para casos en los que por razones de profilaxis en establecimientos de salud, asepsia, razones médicas, conservación o protección de determinados alimentos no puedan ser reemplazados.

También apunta a consagrar por ley la prohibición inmediata de estos plásticos en zonas de mayor protección como las que integren el Sistema Nacional de Áreas Protegidas, emulando lo que ya ocurre en otras partes del mundo.

Tierra del Fuego es un verdadero ejemplo en esta materia, puesto que, a través de ordenanzas municipales en las tres ciudades, ha iniciado un proceso de desplastificación prohibiendo el uso de sorbetes, vasos, platos, revolvedores y recipientes de un solo uso  dentro de los locales gastronómicos. Además en Ushuaia, el año pasado se logró la prohibición de venta de hisopos de cabo plástico.

De hecho, la agrupación A Limpiar Ushuaia, impulsora de estos proyectos de ordenanza, participó activamente en la redacción del proyecto de ley que volvió a ingresar al Congreso y ha colaborado en la redacción de otros proyectos de ordenanza presentados en otros municipios del país.

La diputada Brenda Austin señaló que la iniciativa “recupera los acuerdos alcanzados en la Comisión de Recursos Naturales y Conservación del Ambiente Humano en noviembre de 2020, cuando por unanimidad se dio despacho a un dictamen unificado, el que finalmente perdió estado parlamentario para el actual período legislativo”.

La legisladora señaló que “a los efectos del análisis del proyecto se tomó en cuenta el volumen de plásticos que produce la Cámara de Diputados: según un relevamiento de compras de los últimos años, allí se utilizan alrededor de 4 mil vasos descartables por día, a lo que se suman las botellas plásticas de las sesiones y la vajilla de un solo uso que se entrega en los comedores”.

Desplastificar el Estado

La Agrupación A Limpiar Ushuaia impulsó hace dos años una iniciativa para eliminar el uso de plásticos de un solo uso en el ámbito del Gobierno provincial, entendiendo que el Estado no sólo debe promover medidas para proteger el medio ambiente, sino que, sobre todo, debe dar el ejemplo de ello.

La propuesta, era la desplastificación de las dependencias públicas, iniciando el cambio a través del Sistema de Contrataciones Públicas ya que representa una oportunidad para cambiar los patrones de consumo hacia modelos sustentables, fomentando la producción y el suministro de bienes y servicios amigables y respetuosos con el ambiente y con la sociedad.

La iniciativa fue recogida por la legisladora Laura Colazo, quien avanzó en la redacción de un proyecto de resolución cuyo objeto es “establecer las buenas prácticas para la protección del medio ambiente, considerándose los lineamientos para la realización de compras sustentables y considerando los estándares mínimos para la reducción del uso y consumo de plásticos de un solo uso en ámbito de la Legislatura de la Provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur”.

No obstante, el proyecto nunca ingresó a la Legislatura y por lo tanto, la prohibición de plásticos de un solo uso en el ámbito del Estado sigue siendo una deuda pendiente.