Un camión cargado con botellas plásticas de gaseosa perdió parte de su carga días atrás y los plásticos que cayeron quedaron desparramados, generando un impacto ambiental de consideración.
Fueron varios los automovilistas que observaron el episodio y denunciaron a El Cordillerano que, luego del incidente, los plásticos quedaron esparcidos a la vera de la ruta y ahora comenzaron a desparramarse por los alrededores.
El accidente ocurrió en la Ruta Nacional 237, en un sector de curvas cercano a la localidad de Villa Llanquín.
Luego del episodio vial, el camión que protagonizó el hecho fue retirado, aunque la empresa que transportaba la mercadería dejó las botellas en el lugar, debido a que las mismas sufrieron roturas.
Al no tener contenido, los plásticos vacíos comenzaron a volar y desparramarse por las inmediaciones.
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