Los municipales y la productividad de los paros de todos colores. Se acabó la plata dulce y cambian el eje de los reclamos, propio de la picardía política con plata de los contribuyentes, no se curan más. Valeria Méndez una todo terreno de Don Florencio, hace lugar para todo lo que la municipalidad descarta, a veces acierta.
Pulti hizo lugar a la autocrítica pero la noticia fueron los ausentes, clima de tormenta y tempestad política. Hay más de cuestiones de familia, hay experiencia propia que no se traslada a nuevo funcionario mezclado en un mitin inconveniente.
Con gusto a poco, no les alcanza. Ya los municipales están por alcanzar los dos dígitos en paros activos, pasivos, por las dudas, trabajo a reglamento, quite de colaboración, brazos caídos con y sin asistencia a los lugares de trabajo, es decir el manual completo de la ortodoxia gremial que sólo sabe de derechos, premios, bonificaciones y compensaciones. Ahora les llegó la mala y empiezan en otra escala de sus reclamos que ya anunciaron, para que no haya sorpresas.
Van por más. No sabrá de sosiego el gobierno de Carlos Arroyo, se le hará sentir todo el poder del belicoso y sedicioso Sindicato de los Trabajadores Municipales. Ya amenazan por falta de equipos de trabajo, abrir una nueva paritaria y pondrán sobre la mesa de las discusiones temas como la inflación y los tarifazos. Ya está el campo preparado para jugar en los tiempos políticos que se avecinan. Los que pagan impuestos observan cómo se agota un modelo que ya no da para más, porque han formado parte del saqueo.
Leña del árbol caído. La ex 2 del EMTUR Valeria Méndez, no pierde oportunidad de hacer sentir el rigor de su desprecio por el manejo de la comuna. La elección de Don Florencio de colocarla sin escalas luego de la derrota electoral en octubre pasado ya tenía un derrotero fijado. La ex funcionaria de turismo no deja pasar la oportunidad de poner en foco los desaciertos de Arroyo y su equipo nutrido de funcionarios a los cuales la renovación no para de sacudirlos.
El Festín de Valeria. Es así que Valeria se agiganta cuando en el Paseo Aldrey logra soplar exposiciones, actos culturales que tienen que ver con las instituciones marplatenses. Es una ventana que abre de par en par para llenar a como dé lugar y gratis el espacio del Centro Cultural de Alberti y Sarmiento. Es así que celebró que el Museo de las Comunicaciones (o parte del mismo) pasara del chalet de Camet a ser exhibido en el nuevo centro comercial marplatense.
No es pura coincidencia. Hay quienes recuerdan que previo a la Cumbre de las Américas el “Huasa” González pasó subrepticiamente a ocupar la ex secretaría de Obras en lugar de Norberto Cánepa, allá por el 2005. Y no era para menos Néstor Kirchner quería tirar la casa por la ventana para ser un gran anfitrión de Hugo Chávez, recuerdan algunos memoriosos. Cánepa no lo podía creer pero lo habían rajado justo cuando venía lo mejor.
Algún punto de contacto. Hay que mover la obra pública, mostrar otra dinámica y tener manejo para disponer (como en aquel entonces) de miles de millones de pesos. La situación y el traspaso tuvo alguna similitud con lo ocurrido con Eduardo Abud, cuya remoción dicen sorprendió al propio intendente, que negó haber estado en conocimiento de su enésimo reemplazo en el gabinete. Hay operadores en las sombras que son verdaderos titiriteros y siempre están en el lugar justo. Abud se fue refunfuñando convencido que lo movieron por poderosas razones.
Autocrítica enmascarada. “Estamos acá para hacernos cargo de lo que no supimos o no pudimos hacer, pero estamos acá también para decir con toda claridad que no fue una norma en estos 19 años resignarnos. La norma fue rebelarnos. Nosotros nos rebelamos contra la resignación, contra las injusticias, contra los tarifazos, contra las privatizaciones ridículas como la del Casino. Nos rebelamos contra un Parque Industrial clausurado, nos rebelamos contra la falta de cultura en los barrios, nos rebelamos por la duración del plan PEBA. Nosotros creemos que cada familia marplatense es un aliado y no es un aliado partidario…”.
A Pulti lo están midiendo. Arengó el ex intendente a sus partidarios el viernes por la noche durante la cena en la que se celebró el 19º aniversario de la fundación de Acción Marplatense, con la notoria ausencia de los ediles Santiago Bonifatti y Héctor Rosso, que parece que siguiendo a pie juntilla la norma de rebelarse, estarían conspirando contra el líder fundador acosado por la Justicia para desplazarlo de cara a las legislativas del año próximo.
Se deshilachan los harapos de todos. Si bien la lupa de los analistas de la política lugareña está enfocada en los avatares internos, la inestabilidad y los altos sueldos de los funcionarios del gabinete municipal del frente oficialista Cambiemos, y en el jefe comunal a quien parece que se le deshilacha el impermeable azul de tanto jaleo, la silente interna de AM sería un aquelarre que poco tendría que envidiar a quienes los doblegaron en las urnas por lo que “no supimos o no pudimos hacer”, según el no menos erosionado líder de AM …
Como caballo arriba del techo. Desubicado en el marco de una nueva manifestación por parte del Sindicato de Trabajadores Municipales el pasado viernes, imprevistamente la lente de una cámara advirtió la presencia de un novato funcionario, no por la edad, el cual se lo vio dialogar en tono amistoso con los manifestantes que presionaban para cobrar sus sueldos.
Siempre cuestiones de familia. Algunas fuentes rápidamente aclararon que “Beto” se encontraba trabajando dentro del Palacio Comunal y su inexperiencia/torpeza política, pudo haber provocado un escándalo mayúsculo dentro del gabinete municipal, sobre todo después que su esposa hizo hasta lo imposible para que la familia se mantenga unida y brinde con cerveza, si es artesanal mejor.
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