Valentina, de 14 años, sabía lo que era un "kit", el protocolo de estudios y medicamentos que se le administran a la víctima de un ataque sexual inmediatamente después del hecho; lo había visto en una serie de televisión. Incluye, por ejemplo, medicamentos para reducir las chances de una infección de HIV. Pero en el Hospital Municipal de la localidad bonaerense de San Pedro, a casi 200 kilómetros de la Capital, el "kit" tardó en llegar, lo mismo la atención ginecológica correspondiente. María, la madre de la joven, comenzó a reclamar enérgicamente. La atención finalmente llegó, casi 7 horas después de la llegada de la joven a la guardia, de acuerdo al relato de fuentes directas de la causa. Incluso, algunos de esos medicamentos tuvieron que ser gestionados de forma particular. Por esto, suspendieron por 15 días al médico que revisó a Valentina para certificar el abuso: había llegado al hospital cuatro horas después de ser notificado.

María tenía razones suficientes para impacientarse: poco antes esa noche en marzo último, Valentina - el nombre de fantasía de la joven- había sido forzada frente a su novio a practicarle sexo oral a cinco desconocidos a la salida de una fiesta de 15 a mediados de marzo último. No solo eso; también le tomaron fotos.

Por el hecho, hay tres detenidos con prisión preventiva ya dictada, entre ellos un menor de edad y dos mayores, de 25 y 37 años respectivamente, todos ellos changarines, cosecheros de frutas del barrio La Tosquera de San Pedro, unidos por lazos de parentesco y amistad. Uno de los dos prófugos ya fue identificado: una orden de detención ya está librada en su contra. Todos los detenidos, en un primer momento, se negaron a declarar. Los dos mayores eventualmente lo hicieron: se exculparon del hecho, pero reconocieron haber estado juntos la noche anterior. Ninguno de ellos tiene antecedentes por delitos sexuales. El mayor de ellos apenas tiene en su prontuario delitos contra la propiedad.

¿Fue un ataque programado? ¿Los cinco hombres salieron a violar? Alejandro López, a cargo de la UFIJ Nº 2 del Fuero Penal Juvenil de San Nicolás y encargado de llevar adelante la causa, dice aInfobae: "No creo que hayan tenido el plan previo de terminar en un abuso sexual. No veo ese perfil en los detenidos. Tenían la idea de robar, se los está investigando por posibles hechos de robo. Pero con la víctima fueron haciendo lo que quisieron, la volvieron un objeto de perversión". Valentina, en un comienzo, había denunciado un robo, y no una violación en la comisaría de San Pedro, según López: el ataque sexual surgió más adelante en el relato de la chica.

Hoy, el fiscal espera resultados de diversas pericias que serían esenciales para cerrar la causa. Espera cotejos de ADN a prendas de la víctima y de los detenidos y resultados de varios hisopados. A uno de los detenidos, por ejemplo, se le halló una camisa del novio de Valentina. También se encontró en un pajonal de San Pedro, tras un largo rastrillaje, el arma calibre 38 con la que el menor detenido habría amenazado a la chica.