María Eugenia Vidal descartó la posibilidad de que se pague un bono de fin de año especial a los empleados públicos de la provincia de Buenos Aires, al argumentar problemas financieros. "Hoy la provincia no está seriamente en condiciones afrontar un bono de fin de año", afirmó Vidal.

Me encantaría decirles que sí a los trabajadores, pero lamentablemente la Provincia está atravesando una situación muy delicada", destacó Vidal durante una conferencia de prensa conjunta con el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, tras la primera reunión de ‘Gabinete metropolitano’. En ese contexto, Larreta también se alineó con la bonaerense y remarcó que "vamos a seguir lineamiento nacional".

Vidal aseguró que "lamentablemente la provincia está atravesando una situación muy delicada", al salir al cruce del reclamo que la mayoría de las centrales sindicales están haciendo tras la devaluación del peso que operó tras la apertura del cepo cambiario.

La negativa a la posibilidad de un bono aparece en la antesala de la reunión que el miércoles Vidal mantendrá con los gremios integrantes de la CTA Autónoma, quienes adelantaron que le reclamarán ese plus.

El reclamo sindical ya había sido desestimado por el gobierno nacional. En las últimas horas, el ministro de Trabajo, Jorge Triaca descartó la implementación del bono, al igual que su par de Agroindustria, Ricardo Buryaile: "A los amigos de la CGT les digo que entiendo lo que reclaman, pero que ellos entiendan que este gobierno nacional tiene enormes trabajos por hacer. Hay que esperar un poquitito", dijo Buryaile.

El pedido sindical tuvo el fin de semana un nuevo capítulo cuando el secretario general de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) nacional, Hugo ‘Cachorro’ Godoy, advirtió que el gremio que encabeza podría lanzar medidas de fuerza en los próximos días si el Gobierno no otorga a los empleados públicos un bono que compense “los aumentos (de precios) brutales que ha habido en los últimos meses”.

En este sentido, alertó que no descarta tomar medidas “si no hay un cambio en la actitud del Gobierno, porque la devaluación del 40 por ciento y los aumentos brutales que han habido en los últimos meses deterioraron severamente el nivel salarial de los trabajadores”.