En paralelo al contacto con vecinos, la Gobernadora juntó a un grupo de intendentes. Es un esquema que repetirá en otros distritos.
María Eugenia Vidal decidió hacer espacio en su agenda para contener a los intendentes y fortalecer el espacio territorial. Se trata de un cambio de estrategia importante hacia el interior de Cambiemos porque aceptó destinar tiempo y escuchar también a sus referentes en los distritos, algo que no había sucedido hasta ahora.
La primera reunión ocurrió este martes en 9 de Julio cuando la Gobernadora almorzó con un grupo de intendentes de la Cuarta Sección. Desde La Plata explican que se trata de una serie de reuniones de cara a la elección general.
Es una especie de contracara de la estrategia de escuchar a los vecinos. En este caso, Vidal hace lugar en su agenda y destina tiempo a su armado político. Algo que hasta ahora había sido desestimado.
Los jefes de campaña de Vidal le piden a los legisladores que movilicen con micros a la marcha de Macri en Junín
Desde 2015, los intendentes tuvieron escaso contacto con la Gobernadora. Ministros del gobierno reconocieron tras la derrota de agosto que durante los últimos tres años se trabajó mucho con los alcaldes de la oposición, pero que los propios fueron desestimados.
El cambio de estrategia coincidió con un momento de tensión entre los intendentes y legisladores con el Ejecutivo. Es que tras la derrota de agosto asomaron las críticas al entorno político de la Gobernadora. El reclamo de fondo tiene que ver con centrar la campaña en la figura de la Gobernadora y por prescindir completamente de los intendentes.
Los 69 intendentes de Cambiemos eran recibidos por Vidal una vez al año en una mega reunión donde no había forma de intercambiar opiniones. Vidal se ocupaba de mantener su distancia, siempre custodiada por sus dos ministros de confianza, Federico Salvai y Alex Campbell. Solo un par de alcaldes tomaban el micrófono para decir lo políticamente correcto.
El espacio de debate fue el Foro de Intendentes que lideró Jorge Macri. Allí hubo contención para algunos temas de gestión, pero los lineamientos políticos se dirimían en entre la Gobernadora, Salvai y Campbell.
El Foro sirvió en los dos primeros años, pero después fue perdiendo fuerza hasta casi diluirse en los últimos meses. Al punto que tras la derrota de agosto no se volvió a reunir.
Durante los casi cuatro año de gobierno de Cambiemos, los intendentes fueron completamente marginados de la discusión política. La reunión significa un giro en la estrategia de Vidal, quizás con miras a su futuro político.
Pero ese aislamiento parece haber terminado. Vidal decidió esta vez que era el momento de darle espacio a su armado político. Una decisión que quizás tenga más que ver con su futuro que con el presente inmediato. Esta vez le tocó a los intendentes de la Cuarta. El esquema seguirá y los legisladores -también silenciados- se ilusionan en ser incluidos.
Sin embargo, esta modalidad no se estrena en el noroeste bonaernese. Ya ocurrió en otros ámbitos. Por caso, en su paso por Bahía Blanca hace diez días la Gobernadora ya había mantenido este tipo de reuniones.
Vidal estuvo el lunes en Junín en una escala de la marcha del ‘Sí se puede' que encabeza Mauricio Macri. Este martes tuvieron agendas separadas, la Gobernadora recorrió 9 de Julio, un distrito gobernador por el macrista Mariano Barroso.
Acompañada por el ministro de Salud, Andrés Scarsi, visitó las nuevas instalaciones y los flamantes equipos del Hospital Julio de Vedia. Más tarde recorrió las obras de pavimentación de la avenida Urquiza.
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