Hay que remontarse hasta las elecciones del 26 de octubre de 1997 para encontrar una derrota del peronismo en la Tercera Sección Electoral, el conjunto de 19 municipios que en su mayoría conforman los municipios del sur del Conurbano, más La Matanza, la comuna más poblada del país.

“La Tercera” se convirtió en el bastión del peronismo, el lugar al que apunta la oposición para hacer una buena elección y desde donde surge Néstor Grindetti, intendente de Lanús, precandidato a gobernador de Patricia Bullrich y el único representante de Juntos por el Cambio que logró sostener el poder en el territorio peronista por excelencia.

Según el último Censo, en población solo entre La Matanza (1.837.774), Lomas de Zamora (694.330) y Quilmes (636.026) suman más que toda la Ciudad de Buenos Aires. Pero además, figuran otras localidades populosas como Almirante Brown, Avellaneda, Berazategui, Esteban Echeverría, Ezeiza, Florencio Varela y Lanús, el único gobernado por la oposición.

La Tercera también contabiliza municipios por fuera del Conurbano: Berisso, Cañuelas, Ensenada, Presidente Perón, Punta Indio San Vicente, Brandsen, Lobos y Magdalena. Los últimos tres gobernados por Juntos por el Cambio.

Tercera Sección electoral, el territorio que define varias elecciones

Se trata de la zona a la que apunta Juntos por el Cambio, donde busca achicar las diferencias y así lograr la gobernación, como lo logró María Eugenia Vidal en 2015. La coalición fundada con el nombre Cambiemos por Mauricio Macri, Elisa Carrió y Ernesto Sanz obtuvo, hace ocho años, el 30% de los votos contra los 42% del kirchnerismo que llevó a Aníbal Fernández a gobernador.

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Un dato alentador para la oposición es que en las últimas tres elecciones: tanto en 2017, como en 2019 y en 2021, Juntos por el Cambio no bajó del millón de votos.

Sin embargo, una muestra de que aún es el bastión del peronismo lo da la última elección a gobernador: el Frente de Todos superó por primera vez el récord de los dos millones de votos en la Tercera. Esto refuerza la tendencia de los últimos 25 años porque cuando el peronismo no ganó la elección a nivel provincial, esta sección electoral fue la resistencia en votos, en especial para el kirchnerismo.

Algunas de las claves están en los circuitos electorales decididamente peronistas. En 2019, en uno de los tres circuitos de Virrey del Pino el Frente de Todos sumó el 77% de los votos y Juntos por el Cambio el 11%. Ese mismo año, en el circuito del barrio San José, de Almirante Brown, el peronismo se llevó el 70,55%, mientras que Juntos por el Cambio llegó al 18,18%.

A su vez, en el circuito 583 de Lomas de Zamora, el más grande de ese municipio dado que abarca a barrios como Ingeniero Budge, Villa Albertina, Fiorito, Villa Centenario, los números fueron abrumadores: el 72,83%, contra el 16,44% de Juntos por el Cambio.

Hace dos años, Diego Santilli se impuso ante Victoria Tolosa Paz, pero en esta sección electoral el resultado fue 45% a 32% en favor del Frente de Todos. Cuatro años antes, en 2017, cuando Cristina Fernández de Kirchner perdió en la Provincia contra Esteban Bullrich, en la Tercera el resultado fue 44% a 35% a favor de la hoy vicepresidenta.

Otra recordada derrota para el kirchnerismo fue la que padeció en la Provincia a manos de Sergio Massa. En 2013, el kirchnerismo que llevaba al tope de la boleta a un intendente de esta sección electoral, Martín Insaurralde (Lomas de Zamora), logró ganar por 41% a 39% en una elección en la que Massa se impuso en la provincia.

También funcionó como fortaleza en la primera derrota kirchnerista en la Provincia. Después del conflicto entre el gobierno y el campo en 2008, en la provincia de Buenos Aires surgió Francisco De Narváez que le ganó la elección al ex presidente Néstor Kirchner. Pero en la Tercera el kirchnerismo venció por un categórico 40% a 32%.

De hecho, desde el regreso de la Democracia el peronismo solo perdió en tres elecciones en la Tercera. Fue en las elecciones de 1983, 1985 y 1997. A fines de los ’90, la candidata de la flamante Alianza a diputada nacional de la Provincia fue Graciela Fernández Meijide, mientras que del otro lado estaba Hilda “Chiche” Duhalde.

Y en la Tercera, Hugo Guerrieri, que encabezaba la lista de diputados provinciales, venció al histórico peronista Osvaldo Mercuri por apenas 59.828 votos. Fueron 1.081.014 votos para la Alianza y 1.021.186 para el PJ, en la última derrota peronista en la Tercera, el lugar al que apunta Juntos por el Cambio.

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Con esa fortaleza, se deposita en el territorio del batacazo la posibilidad de que Unión por la Patria, el nombre con el fue rebautizado el kirchnerismo, pueda perder los distritos en los que es gobierno ahora.

En ese contexto, ya definieron que irán por la reelección Fernando Espinoza en La Matanza, Mariano Cascallares en Almirante Brown, Fernando Gray en Esteban Echeverría, Mayra Mendoza en Quilmes, Jorge Ferraresi en Avellaneda y Andrés Watson en Florencio Varela, entre otros. Queda por definirse qué hará Martín Insaurralde en Lomas de Zamora; todo indica que el actual jefe de Gabinete bonaerense se refugiará en el territorio.

En un distrito menos populoso pero con un fuerte simbolismo se atestigua un cambio de mando: Alejandro Granados anunció que no irá por la reelección en Ezeiza pero delegó la responsabilidad en su hijo, Gastón, quien ya tiene una fuerte presencia en la toma de decisiones, tanto que lo reemplazó en los extensos períodos de licencia que tuvo el Sheriff en los últimos tiempos.

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Dentro de la estructura del Conurbano de la Tercera, Grindetti en Lanús apunta a retener la intendencia para Juntos por el Cambio pero ya con Diego Kravetz como candidato. Es uno de los distritos en los que la oposición deposita la expectativa de hacer una buena elección en esta sección electoral.

Otro es Quilmes, donde Martiniano Molina fue jefe comunal entre 2015 y 2019. Se da por descontado que el cocinero surfeará la interna para llegar a octubre en el mano a mano con Mayra Mendoza.