Se debió principalmente a la menor afluencia de turistas. Con respecto a los primeros 15 días de 2012, llegó entre 2% y 3% menos de visitantes. Si bien la facturación muestra un alza de 10%, Fedecom destacó que la inflación real fue de 25%, por lo que el consumo “fue inferior”.
Así lo confirmó a Comercio y Justicia el titular de la Federación Comercial de Córdoba (Fedecom), Rubén Martos, quien indicó que “la migración hacia las localidades o ciudades turísticas generó la baja en el nivel de consumo de sus lugares de origen, en los que se registraron bajas. A ello hay que sumarle que el incremento en las ventas que se reflejó en los lugares que sí son turísticos no alcanzó a compensar la gran caída, por lo que el resultado de la primera quincena fue negativo”.
El dato contrasta con el informe que difundió la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), que detalló que las ventas minoristas, en el país, se incrementaron 1,5% en los primeros quince días del año, respecto de igual período del 2012.
“El turismo de primera quincena de enero impulsó la actividad comercial en todas las ciudades que integran el circuito nacional. En 15 días viajaron más de 5,1 millones de personas por la Argentina, quienes inyectaron 7.551,3 millones de pesos en la compra de bienes y servicios”, se indicó.
La cantidad de personas que viajó por el país entre el primero y el quince del primer mes resultó -según CAME- “2,2% más que en igual periodo del año pasado. Eso significó que 110 mil personas más que en 2012 eligieron veranear en la primera mitad del mes en alguna ciudad nacional”.
Sin embargo, la mayor cantidad de gente que pasó vacaciones en la primera parte del año eligió destinos diferentes a los que ofrece Córdoba, ya que, según el relevamiento de Fedecom, la cantidad de turistas que visitaron la provincia se ubicó entre 2 y 3% por debajo del total alcanzado en los primeros quince días de enero de 2012.
La información es corroborada por la CAME, que reconoce que el inicio de la temporada en Córdoba “fue calmo, e incluso levemente por debajo del año pasado” en cantidad de visitantes.
Si bien indica que dentro de los destinos top del verano, “se destacaron Carlos Paz y Villa General Belgrano en Córdoba”, los visitantes que llegaron a la provincia “también eligieron variantes como Capilla del Monte, Río Tercero, La Cumbre, La Cumbrecita, La Falda y Santa Rosa de Calamuchita”.
“Se estima que casi un millón de turistas recorrieron la provincia en los primeros quince días de enero, la mayor parte de ellos concentrados en Punilla, Calamuchita y Traslasierras”, informó la entidad empresaria y aclaró: “De todos modos, el inicio de la temporada fue calmo, levemente por debajo del año pasado, aunque a partir de la primera semana el flujo de turistas comenzó a ser más intenso”.
“Los festivales y eventos fueron los principales atractivos, y permitieron intensificar el tránsito de gente los fines de semana. El gasto promedio diario por visitante se ubicó en 270 pesos y las ventas medidas en cantidades reportadas por los comercios fueron levemente inferiores a los primeros 15 días de enero de 2012”, se indicó.
Consumo
Según la CAME, el aumento en el volumen de ventas minoristas en el país se debió a la mayor cantidad de gente que salió de vacaciones, ya que “el turista se mostró algo más austero en sus gastos este año”.
Fedecom coincidió con el dato y agregó que, pese a que el nivel de facturación mostró en Córdoba un alza de 10% respecto a lo alcanzado en la primera quincena de 2012, “la inflación real se ubicó en torno al 25%, por lo que el resultado da cuenta de que el consumo ha sido menor”, dijo Martos.
A su vez, la CAME evaluó que la mayor diversidad de destinos elegidos tuvo que ver con “el mayor control del presupuesto familiar. Es que Argentina tiene costos para todas las necesidades: mientras quienes veranean en Mar del Plata gastan en promedio 280 pesos diarios per cápita, o en Gualeguaychú $260, por vacacionar en Pinamar se gasta $350 pesos, en Bariloche el gasto por jornada llega a $650 y en Ushuaia, $1.800”.
Fines de semana largo
También CAME hizo referencia a la incidencia de los fines de semana largos, que “cambiaron la manera de viajar a los argentinos, disminuyendo caudal de viajeros en la tradicional quincena récord del año”. “Se notó que destinos que antes tenían mucha estacionalidad, con fuertes picos en enero, disminuyeron sus récords por la influencia del cambio de estilo vacacional que se está produciendo en nuestro país. Hoy las familias buscan más salidas en el año y vacaciones más cortas. El calendario de fines de semana largos orienta el consumo en ese sentido”, concluyeron los empresarios.
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