Exigen que el municipio se ponga en acción para prevenir estas desgracias. El intendente Campero ya había sido advertido que el eucalipto que mató al niño corría riesgo de caerse.
Vecinos de Yerba Buena realizan este lunes una marcha pacífica en protesta por el niño que falleció al caer un árbol viejo en la avenida Solano Vera al 1.000. Exigen que el municipio se ponga en acción para prevenir este tipo de tragedias.
La marcha comenzó desde la avenida Aconquija, frente al edificio de la intendencia. Gustavo Guerrero tenía cinco años. Murió el viernes pasado, cuando el transporte escolar en el que iba al jardín de infantes fue aplastado por un eucalipto, que cayó de repente en medio de la Solano Vera.
El árbol que cayó tenía unos 50 metros de altura y -calculan- unos 60 años de antiguedad. Los propietarios de la casa en la que estaba hicieron pedidos al gobierno actual y al anterior, para que los ayudaran a podarlo. Ninguna de sus solicitudes fue escuchada.
El intendente de Yerba Buena, Mariano Campero, llegó hasta la marcha que realizan los vecinos de ese municipio y estableció una conversación con los familares del niño fallecido, que exigen justicia por la muerte del pequeño.
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