El abogado que fue candidato a intendente por el espacio que conduce Sergio Massa, destacó el fortalecimiento del Frente Renovador en el escenario actual, pero dejó en claro que no se pueden volver a cometer viejos errores, como el de presentar cinco listas en un mismo distrito: “Hay que dejar de lado los egos y apostar a la unidad”.

- ¿Cómo viste a Julio Garro durante esta primera etapa de su gestión?

-Cuando uno es intendente, lo es durante los cuatro años de gestión, las 24 horas de todos los días. Uno puede analizar dónde pisa durante los primeros meses, con qué situación se encuentra. Pero ya es hora de poner manos a la obra.

La sensación que tengo es que durante el primer año costó poner el vehículo en la pista. Cabe mencionar que el vehículo es importante, porque la Municipalidad de La Plata tiene un presupuesto de 4 mil millones de pesos, no es una Comuna pobre, tiene recursos.

Durante este año, a ese vehículo de carrera le está faltando la puesta a punto, está girando en el circuito pero muy lejos de las expectativas de la ciudadanía: la demanda en cuestiones elementales crece día a día. Hay muchas asignaturas pendientes como la limpieza, la recolección, la iluminación, los baches y la inseguridad.

- La Plata es una de las ciudades más inseguras… ¿Cómo se combate?

-La inseguridad no se combate solamente con cámaras, patrulleros, puestos fijos y con caminantes, si no con una política, un plan de seguridad para la Ciudad que atienda a las situaciones cotidianas que ponen en jaque a muchos platenses.

Nosotros le votamos la Emergencia en Seguridad al intendente, esos fondos hay que destinarlos rápidamente a resolver con urgencia.

El pasado año, desde el Frente Renovador, le brindamos al intendente todas las herramientas necesarias para gobernar. Ahora es una cuestión que tiene que resolver él.

- Se acercan las elecciones, ¿Cómo está la interna del Frente Renovador?

-El Frente Renovador  tiene una situación pendiente que viene desde las últimas PASO, en la que se presentaron cinco listas. No podemos repetir esa experiencia. Para que no suceda lo mismo, lo primero que hay que hacer es asumir los errores, todos tenemos algún grado de responsabilidad. Lo que nadie tiene  que sentir es que es el patrón de la estancia, en la política no hay patrones, hay conductores que tienen como deber articular los mejores equipos para gobernar la ciudad.

- ¿Cambiemos gobierna para el casco urbano?

-La ciudad durante muchos años tuvo una visión muy de casco urbano, con una fuerte centralización administrativa y gubernamental. Hoy más que nunca.

Los barrios del sur, como Villa Elvira y Altos de San Lorenzo, alojan a más de 150 mil personas y tienen solo dos delegaciones municipales, lo mismo sucede en Los Hornos o Villa Elisa, localidades que necesitan mucha más atención.

Esa vieja tendencia de hablar de periferia no es buena, porque no existe la periferia, lo que hay son localidades, que tienen la imperiosa necesidad de mejorar sus servicios cotidianos.

Provincia

- A pesar de los traspiés, María Eugenia Vidal sigue midiendo muy bien en la Provincia. ¿A qué cree que se debe?

-La mayor ventaja que tiene la gobernadora es su antecesor: Daniel Scioli fue un gobernador que dejo mucho que desear, sus últimos cuatro años estuvieron abocados a la campaña nacional y descuido la provincia. Eso fortalece mucho la imagen de María Eugenia Vidal.

Cualquier cosa que lleve adelante esta administración, por más ínfima que parezca, parece un acto heroico. Cuando en realidad, la obligación es atender cada detalle de la Provincia, para que recobre su situación estratégica a nivel nacional, con la finalidad de que los bonaerenses vivan mejor.

A pesar de varios errores que cometió, por el momento, la gente ve con buenos ojos y con paciencia su gestión. Uno de esas equivocaciones fue como manejó el conflicto docente, mostrándose muy caprichosa y no adoptando una actitud negociadora, más dialoguista.

Nación

- Muchas veces, el gobierno nacional adopta medidas y luego tiene que dar marcha atrás por las repercusiones negativas. ¿Hay falta de tacto?

-Más allá de la situación general que vive el país, hay torpeza. Situaciones de fácil resolución que el gobierno, por impericia, se mete en caminos que luego le cuesta retroceder o en cuestiones dialécticas que tienen que ver con el sentido común de la gente. Decir “tener que caer en la escuela pública” o no saber cuánto gana un jubilado,  no corresponde a un presidente.

Dividir el Ministerio de Economía en seis partes y que el gabinete pareciera tener patricios y plebeyos, me da la sensación que complica a Cambiemos. Gobernar significa conformar equipos que resuelvan situaciones cotidianas de la ciudadanía: tanto a nivel nacional, provincial como municipal surgen situaciones de emergencia que deben ser resueltas