“En noviembre de 2007, electo gobernador de la Provincia y a poco de asumir,Daniel Scioli lanzó una promesa impactante, novedosa y efectista: ‘despapelizar la administración pública’. Poco se hizo desde aquella fecha hasta hoy”, expuso el legislador al elevar su propuesta para que se utilice papel reciclado en la Cámara que integra.

 El Proyecto de Resolución contiene dos aspectos relevantes: a) implementar en las distintas áreas de esta Honorable Cámara de Diputados, la utilización de papel reciclado en las resmas y demás  insumos de papel y cartón; y b) disponer el papel y cartón usado, de modo de  articular los mecanismos necesarios para su reciclado.

El representante de la Segunda Sección provincial en la Legislatura, fundamenta su proyecto recordando que “el interés y la necesidad de preservar el ambiente y los recursos naturales han ido acrecentándose en todo el mundo, en nuestro país  y en los diferentes espacios de la comunidad”.

Prosiguiendo esa línea argumental, Santiago recuerda que el artículo 28 de la Constitución Provincial expresa que “los habitantes de la Provincia tienen el derecho a gozar de un ambiente sano y el deber de conservarlo y protegerlo en su provecho y en el de las generaciones futuras… En materia ecológica (el Estado) deberá preservar, recuperar y conservar los recursos naturales, renovables y no renovables del territorio de la Provincia”.

Además de manifestar que el papel es un producto que se crea a partir de la pulpa o pasta de celulosa, que se consigue de la madera o con fibras alternativas provenientes de la caña de azúcar, Santiago afirma que “la producción de papel suele tener consecuencias negativas para el entorno, debido al alto consumo de recursos naturales, y a la contaminación causada por las emisiones y efluentes, entre los cuales están los productos clorados o sus derivados usados como blanqueadores, que originan residuos tóxicos y bioacumulables”.

 El legislador nacido en la ciudad de Rojas, edifica su proyecto haciendo referencia a un informe de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), donde se dice que “el uso de papel reciclado es una alternativa más que viable en la actualidad, por lo que una política de progresiva sustitución del papel ‘tradicional’ por éste, es una buena decisión, ya que supone un aporte a la conservación del ambiente a nivel global”.

Es contundente el trabajo de la UNC en cuanto a “las ventajas de reciclar papel”, y enumera la menor cantidad de recursos y energía que insume este proceso: “mientras que para fabricar una tonelada de papel de calidad a partir de celulosa virgen se necesitan 3 mil kilos de madera (5 a 6 metros cúbicos, proporcionados por unos 17 árboles), 300 mil litros de agua y en el orden de 7 mil kW/h de energía; al obtener la misma cantidad partiendo de papel usado recuperado, se ahorran 26 mil litros de agua, 2 barriles de petróleo, 3 metros cúbicos de espacio en enterramiento sanitario y 4100 kW/h”.

Santiago considera que las prácticas y acciones que se implementan en una casa, institución, oficina o fábrica, para evitar el derroche de papel, “contribuyen sustantivamente a la preservación del ambiente en el que vivimos y tienen el beneficio adicional de ahorrarle dinero al usuario”.

“En este contexto -insiste Santiago-, instamos a que la Honorable Cámara de nuestra Provincia asuma el compromiso de poner en funcionamiento acciones para minimizar el impacto ambiental que sus actividades ocasionan”. 

Finalmente, el legislador opositor resalta que su idea “propicia el inicio de la implementación de mecanismos dirigidos al cambio de actitudes, cultura y conductas, tendientes a lograr una participación activa en busca de soluciones a los problemas ambientales locales y globales”.