El informe La revista deja claro que la baja cantidad de reuniones realizadas a lo largo del año repercutió lógicamente a la hora de expresarse en las sesiones de la Cámara baja. La cantidad de palabras expresadas en sesiones fue la menor que se recuerde. Vilma Ibarra fue, después del titular del Cuerpo, la que más palabras emitió. El año 2011 fue el de menos cantidad de sesiones en la Cámara baja desde el retorno de la democracia. Eso repercutió obviamente en la cantidad de palabras emitidas en el recinto a lo largo del año. Un tema que anualmente la revista Semanario Parlamentario, que publica en su edición de esta semana un informe exclusivo sobre el tema. El trabajo elaborado en el marco de su Indice de Calidad Legislativa obviamente no tiene que ver con la calidad de lo que dicen los representantes del pueblo, sino que mide las palabras emitidas por estos. En ese marco, puede verse que la cantidad de legisladores que no emitieron palabra alguna a lo largo del año fue la mayor desde que Parlamentario realiza estos informes a través de su Indice de Calidad Legislativa. Ochenta diputados nacionales no hablaron a lo largo de 2011, marcando entonces que más del 30 por ciento del Cuerpo no tuvo la oportunidad de expresarse. El caso más extremo había sido hasta ahora 2007, cuando fueron 68 los diputados que no abrieron la boca durante el año. Vale reiterar que siempre es el titular del Cuerpo el que más habla, aunque no lo haga a través de discursos. Por ser quien conduce la sesión, otorgando la palabra y anticipando los temas a debatir, es el presidente de la Cámara el que queda siempre primero en los conteos, de ahí que en este caso siempre sea menester atender a quien resulta segundo. Y este año nos encontramos con una novedad. Los casos Eduardo Fellner figuró primero entonces en su condición de titular del Cuerpo, con 18.912 palabras emitidas en su último período al frente de Diputados. Pero en el segundo lugar no figuró por primera vez desde que es diputado nacional el presidente de la bancada oficialista, Agustín Rossi. En efecto, en sus cuatro años como diputado y titular del bloque, el santafesino fue siempre el más locuaz, aunque en 2011 resignó ese lugar encumbrado. Por poco, pero quedó tercero. Primera resultó alguien que ya no está más en la Cámara baja y que por ende hasta dio la ventaja de no asistir a las maratónicas sesiones extraordinarias de diciembre. Vilma Ibarra, que de ella hablamos, figuró en el segundo lugar de los diputados que más hablaron en el año, con 14.688 palabras, 33 más que quien lo sucedió, Agustín Rossi. ¿Las razones? La ley de identidad de género -uno de los debates más trascendentes del año- la tuvo como voz cantante, marcando el ritmo de esa larga sesión en la que fue figura central. Menos expresivos El 2011 fue el año en el que menos palabras se emitieron desde que Parlamentario realiza estos conteos. Prácticamente la mitad de los años impares, que por ser electorales tienen menos sesiones. Con 432.180 palabras emitidas durante el año, fueron menos que en 2007, cuando se expresaron 712.749 palabras, y menos también que en 2009, que registró 748.842. Ni qué decir de 2010, con sus 1.070.213 palabras, o 2008, que tuvo 1.232.372 palabras.