Entre los principales cometidos del contrato se contempla la modernización del nuevo Complejo Ambiental de la isla.
La UTE Nivaria, conformada por las empresas Urbaser y FCC Medio Ambiente, ha comenzado a operar el nuevo contrato de residuos de Tenerife con un presupuesto de cerca de 400 millones de euros, una duración de quince años más una prórroga de otros cuatro y una inversión de casi 52 millones de euros.
Así, dará servicio a más de un millón de habitantes y supone una importante apuesta en materia de sostenibilidad e innovación por parte del Cabildo de Tenerife.
El servicio contempla la administración del Complejo Ambiental de Tenerife y de los cuatro centros logísticos de gestión de residuos, con una posible incorporación de tres más a lo largo de la duración del contrato, detalla la compañía en una nota.
Por parte de la UTE, Carlos Pérez, director general de Tratamiento de Residuos de Urbaser, señaló que enfocan este contrato “con mucha ilusión, porque se alinea con las políticas de economía circular incentivando al concesionario a reducir la cantidad de residuos que se mandan al vertedero”.
Jordi Payet, director general de FCC Medio Ambiente, apuntó que este contrato para la empresa que representa “es un nuevo reto ante un marco importante y exigente que es el marco europeo y español, y que se cumplirá atendiendo a todos los desafíos que marcan administrativamente y dando un servicio completamente sostenible para la isla”.
El consejero de Desarrollo Sostenible y Lucha Contra el Cambio Climático del Cabildo de Tenerife, Javier Rodríguez Medina, ha destacado la importancia de “activar un nuevo contrato que revolucionará el modelo, ya obsoleto de gestionar los residuos en la isla”, y aseguró que no podían “seguir dejando pasar el tiempo porque esto supondría seguir retrocediendo, no sólo frente posibles sanciones sino frente a la responsabilidad ambiental que supone seguir enterrando los residuos”.
Rodríguez Medina apuntó que se abre “una nueva etapa que conllevará muchos cambios, todos necesarios frente a la gestión de los residuos, una asignatura que estaba pendiente de aprobar y que ya va camino de su recuperación”.
Novedades
Entre las principales novedades que recoge el contrato destaca el incremento en eficiencia energética y en el uso de energías renovables, lo que permitirá llegar al 93% de reducción de la huella de carbono actual.
Para alcanzar este ambicioso objetivo, entre otras acciones, se implantarán placas solares fotovoltaicas para autoconsumo en todas las instalaciones, abarcando una superficie de unos 15.000 metros cuadrados (casi dos campos de fútbol), y una potencia instalada superior a los 1.800 kW.
De esta manera, se conseguirá generar alrededor de 4,5 millones de kWh, de los que 3,6 millones de kWh serán autoconsumidos.
En el apartado correspondiente al transporte, se prescinde del consumo de energía fósil y se propone la utilización de biocombustible 100% renovable.
Esto supone que la flota que prestará el servicio en la isla, más de 25 vehículos ecológicos, ayuden a reducir considerablemente las emisiones de CO2.
En materia de innovación, se utilizará la última tecnología para incrementar la recuperación de materiales reciclables y se incorporarán sistemas de captación y tratamiento de datos que permitirán realizar una gestión más eficiente y transparente, al tiempo que se disminuye el número de incidencias.
Asimismo, en el apartado de investigación, se han iniciado distintos proyectos de I+D+i y se han activado compromisos de colaboración con 13 organismos de investigación y universidades para convertirse en un centro de referencia.
Además se ha creado el proyecto Centinela para la Innovación Estratégica de Largo Alcance y se ha propuesto su conversión como la sede de la Asociación Europea de Regiones Ultraperiféricas.
Modernización del Complejo Ambiental de Tenerife
Entre los principales cometidos del contrato se contempla la modernización del nuevo Complejo Ambiental de Tenerife.
Localizado en Arico, la ampliación incluye la construcción de nuevas instalaciones como el secado solar de lodos, la planta de tratamiento de lixiviados, la planta de generación eléctrica con microturbinas de biogás o la planta fotovoltaica, entre otras, además de las ampliaciones de las plantas de tratamiento (mecánico, biológico, afino, desgasificación) orientadas a un incremento de la valorización de materiales y energía.
En cuanto a los Centros Logísticos de Gestión de Residuos Urbanos, entendidos como aquellas plantas de transferencia de residuos urbanos, van a ser complementados con nuevas actividades de valorización que afectarán a tres grandes áreas: Transferencia de Residuos, Tratamiento de Voluminosos y Puntos Limpios.
Las instalaciones asignadas para este cometido podrán llegar a ser siete, siendo tres de ellas de nueva construcción, y estarán dispuestas por todo el territorio insular.
Comentá la nota