En diálogo con Periodistas en la red, Cacace señaló que en el encuentro le manifestaron que existían una serie de irregularidades que las autoridades tienen que resolver, pero que no encuentran solución hasta el momento y también describió algunas desprolijidades que directamente no tendrían solución. Dijo que lo habían invitado otros docentes de la UNViMe, colegas suyos que también dan clase en la UNSL en Villa Mercedes donde es profesor. Y que los estudiantes querían poner en claro su posición a la mayor cantidad de gente posible para que se visibilice su problemática.

En ese contexto y a modo de ejemplo, relató que en la reunión se puso a conocimiento el caso de una chica que estudia una de las disciplinas que propone la recientemente creada universidad, pero que debería seguir sus estudios en La Rioja, ya que la carrera no tendrían el visto bueno de las autoridades nacionales y a pesar de estar dictándose, no está aprobada.

También se refirió a las prácticas, casi inexistentes, en carreras relacionadas con la salud pública, que generan preocupación entre los estudiantes.

De todas maneras, Cacace reconoció que la controversia escapa a la esfera de sus competencias como diputado, ya que es un tema federal y que concurrió invitado a escuchar los reclamos de los jóvenes y, de estar a su alcance, hacer alguna gestión de buenos oficios. Del encuentro también participó Claudia Rocha, presidenta de la UCR.

Tras comenzar la cuarta semana de conflicto, las cosas están en una tensa calma, las autoridades han dado respuesta a algunos reclamos puntuales que hacían los alumnos, pero no hay novedades a uno de los pedidos que también sostienen otros claustros, como la democratización de la universidad, la elección de sus autoridades, el concursado de las cátedras y la eliminación de los contratos basura mediante la cual mantienen sus puestos laborales.

En ese punto Gladys Ciuffo, cuestionada por su gestión, no parece querer dar ninguna respuesta.