La toma comenzó durante la madrugada del lunes. “La idea es armar un barrio organizado”, aseguró uno de los vecinos.
Las precarias carpas fueron instaladas el lunes a la madrugada y las maderas y nylons ya estaban dando forma a casillas ayer por la tarde: la propuesta es dividir la tierra y que cada una de las 120 familias apostadas se quede con una porción del terreno y levante su casa allí. “Barrio Pueblo Unido”, es el nombre del flamante asentamiento que se erige en el Barrio Almafuerte de Glew.
La zona tomada es de unas cinco manzanas, en un predio de seis hectáreas ubicadas sobre las callesArias y Spoile, localidad de Glew, Almirante Brown. “Tenemos la esperanza de que esta sea nuestra tierra”, sostuvo el referente de los vecinos, Raúl García en diálogo con Info Región.
Explicó que con el alba, se acercaron al predio unos 15 efectivos de la Policía de la provincia de Buenos Aires, pero al no tener “orden de desalojo”, no les exigieron que abandonen el terreno.
La oportunidad. Los okupas explicaron que el predio estaba abandonado y no tenía alambrado. “La gente vio la oportunidad” y se metieron. Así, los vecinos que esperan “vivir dignamente” y “tener un terreno como todos”, dieron cuenta del origen de la toma. “La idea es armar un barrio organizado, no una villa”, aclaró García.
Negociación entre okupas. El objetivo es que “todos tengan su terreno y no se armen disturbios”, aseguró el hombre en diálogo con este medio. “Venimos pacíficamente, armamos un lugar y vemos si esto se da. Todos los vecinos que no tenían un lugar donde vivir hoy lo tienen”, resaltó.
Al cierre de esta edición, la Policía no había desalojado las tierras, pero uno de los dueños del predio se acercó para explicar que era suyo y que el objetivo era hacer una plaza y una calle en esa zona. Por otra parte, una de las okupas aseguró que "hace más de un año la Municipalidad se comprometió a sanear, limpiar el terreno y hacer una canchita, pero no hizo nada".
Vecinos apoyan la toma. Una vecina del barrio, Teresa, al enterarse de lo que estaba sucediendo, se presentó al lugar y afirmó que el “predio estaba vacío, nadie lo habitaba”. “Los vecinos estaban tratando de tomar pacíficamente el predio si era fiscal, para pagar y tener un lugar”, contó.
Según la dirigente vecinal de las familias Nair Servelli, los vecinos que no están involucrados en la toma la “apoyan”, porque consideran que ese “lugar es una boca de lobo, donde ya hubo robos”. Afirmó que "muchos de los que están tomando son vecinos el barrio Almafuerte que no tienen vivienda, que no tienen para alquilar, o no tienen para renovar el contrato o para juntar todo lo que les piden. También hay familias que estaban viviendo en casa de parientes".
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