La Corte Suprema tucumana rechazó la nulidad de los comicios de agosto pasado y dio por válido el resultado electoral que dio ganadora a la fórmula del Frente para la Victoria, encabezada por Juan Manzur y Osvaldo Jaldo. La decisión, difundida esta madrugada, anularía la cautelar que impedía la proclamación del nuevo gobernador de Tucumán, dispuesta por la Cámara Contencioso Administrativa. Además, habilita a la Junta Electoral provincial a proclamar a los ganadores según lo dispuesto por el Código Electoral.

La decisión de la Corte fue anunciada por Marcelo Caponio, apoderado del FPV. “La decisión fue unánime”, señaló. El tribunal sesionó con sus dos vocales naturales, René Goane y Daniel Posse, y los camaristas Carlos Ibáñez, Benjamín Moisá y Raúl Bejas, elegido por sorteo.

La primera reacción de la oposición fue declarar que la cautelar continúa vigente. Esto significa que la proclamación de un nuevo gobernador quedaría suspendida hasta que se resuelva la cuestión de fondo. Esto dependerá de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, a la que acudirán en apelación. El caso podría complicarse si, en las próximas horas, la Junta Electoral de Tucumán proclama la fórmula de Juan Manzur y Osvaldo Jaldo.

Llamó la atención el momento elegido para esta decisión. Según el escrutinio definitivo, el K Manzur venció por casi 12 puntos al radical José Cano. Las sospechas de fraude frenaron su proclamación.

Ayer, fuentes políticas y judiciales explicaban que en la conformación de la Corte, donde hubo que reemplazar a tres jueces por excusaciones, sorprendieron dos cosas, que hacían presagiar un fallo favorable a los K. La celeridad en que se llevó adelante el sorteo y reemplazo, que en otros casos se extendió a semanas. Y, también, que el Supremo Tribunal trabaje un sábado, como ocurrió anteayer, cuando el cuerpo resolvió las recusaciones en contra de Daniel Posse y de dos de los tres reemplazantes. A Posse se lo quería separar por ser hermano del fiscal de Estado y a unos de los conjueces salidos del sorteo, Benjamín Moisá, se lo impugnó por ser pariente político de un legislador muy cercano al gobernador Alperovich. René Goane, el vocal decano, y Carlos Ibáñez, uno de los sorteados, no fueron designados por el actual gobierno. La sesión de la Corte fue seguida por un acampe de los militantes K en la Plaza Yrigoyen, mientras La Cámpora realizaba un festival.

Antes del fallo, la reemplazante del ministro fiscal, Marta Jerez de Rivadeneira, había dictaminado que las elecciones eran válidas y que la Corte debía revocar la nulidad. El ministro titular, Edmundo Jiménez se excusó por haber sido uno de los ministros récord de Alperovich con más de 11 años y ya desplazado de la Junta Electoral.

Además, ayer los dirigentes K Javier Noguera y Darío Albornoz denunciaron penalmente a los jueces Salvador Ruiz y Ebe López Piossek (quienes anularon el comicio) y a los impulsores del planteo, Cano y Domingo Amaya, por presunta sedición (alzamiento contra el orden público) y prevaricato (dictar algo injusto a sabiendas).

Antecedentes: voto y escándalo

El 23 de agosto, en una jornada en la que hubo entrega de bolsones por voto y hasta quema de urnas, el kirchnerista Juan Manzur sacó 14 puntos de ventaja en el escrutinio provisorio.

Conteo final, cautelar y nulidad

Mientras se hacía el escrutinio definitivo, una cámara provincial ordenó a la Junta Electoral que no proclame un ganador. El conteo final lo dio a Manzur arriba por 11,7%, pero la Justicia anuló la elección.

El fallo de Cámara

La Sala 1 de la Cámara lo Contencioso Administrativo no solo dispuso la anulación de los comicios del 23 de agosto: ordenó que se convoque a nuevas elecciones. El gobierno y los apoderados del Partido Justicialista apelaron y recurrieron a la Corte Suprema de Justicia.