En las PASO, Cambiemos se impuso en la carrera hacia el Cuerpo Deliberante de Tres Arroyos con el 29,86% de los sufragios. Lo siguió el massismo con 20,63%. En tercer lugar, con un escaso margen sobre Unidad Ciudadana, terminó el vecinalismo: 18,96% a 17,59% sobre el kirchnerismo.

Los resultados movieron el avispero interno de la Intendencia, por lo que Sánchez convocó a una junta de urgencia con sus colegas partidarios del Ejecutivo y Legislativo local. Incluso, el propio jefe comunal anticipó que piensa en la posibilidad de retocar su Gabinete. Sin embargo, sus principales asesores le habrían recomendado dar marcha atrás esa decisión debido a que empeoraría el cuadro.

La elección no fue positiva para el oficialismo, no sólo en la ciudad cabecera del partido, sino también en las localidades. Por ejemplo, en Orense, Copetonas y Reta, en comparación con la votación de 2015, en esta contienda descendió del primero al cuarto puesto. 

Incluso, el exintendente vecinalista, Carlos Aprile, se mostró crítico con la actual gestión: "Estar mucho tiempo en el poder no es bueno. Sánchez iba a estar dos períodos y nada más. Se engolosinó, quiso tener un tercer mandato y, luego, un cuarto. Eso no termina bien". En declaraciones vertidas por La Voz del Pueblo, Aprile agregó: "El actual Movimiento Vecinalista no es nada que ver con el que fue en su momento. Se vio en las urnas una saturación de la gente. Como vecinalista de la primera hora, siento una gran decepción". Aprile, a la vez, se mostró satisfecho por el triunfo de Cambiemos en la región ya que su hija, Laura, será candidata a Diputada Provincial.

De no poder torcerse el rumbo marcado por las PASO, Sánchez tendrá el segundo tramo de su mandato sin mayoría en el Concejo. Por eso, la operativa vecinalista para revertir los números ya ha empezado y es probable que tenga su primer impacto en el equipo de trabajo directo del Intendente. Se espera para este martes o miércoles una conferencia pública de Sánchez, con un análisis de los comicios.