El aún cura Julio César Grassi fue trasladado al Penal de Campana esta tarde, luego que ayer lunes el Tribunal 1 de Morón confirmara que deberá quedar detenido para cumplir la condena en su contra por abuso sexual y corrupción de menores alojados en la fundación que presidía, Felices los Niños.

El obispado local expresó su "preocupación" por los acontecimientos aunque le aplicó la medida disciplinaria y le prohibió ejercer como sacerdote hasta que se resuelva definitivamente su situación.

Desde el Obispado de Morón pidieron la intervención del Papa Francisco para que se pronuncie al respecto.

Compartirá la prisión con Carlos Carrascosa, condenado por el caso Belsunce, en la prisión de máxima seguridad de Campana. Aunque las versiones son muchas, hay quienes indican que el condenado por abusar sexualmente de menores, no fue recibido de la mejor manera en el penal de Ituzaingó.

Los abogados defensores apelarán la decisión de la Justicia pero mientras aguardan la resolución Grassi deberá permanecer en prisión. La Corte Suprema confirmó la condena de 15 años.