Sorpresivamente, los profesionales de los centros periféricos de salud del Municipio fueron convocados desde las primeras horas de la mañana de hoy por las autoridades sanitarias, a fin de ser notificados de una serie de disposiciones que establecen traslados y modificaciones de los equipos de trabajo de las salas.

Sin aparente notificación previa, profesionales, enfermeros y otros auxiliares sanitarios fueron convocados desde las 8 de hoy ante las autoridades sanitarias, a fin de ser notificados de los cambios en las plantas funcionales de los centros barriales, lo que generó una espontánea manifestación en las puertas de la Secretaría de Salud del Municipio, ante el creciente descontento del personal.

Las convocatorias continuaban hasta el cierre de esta edición -y estaban previstas hasta las 16- y pese a la falta de ratificación oficial, tanto desde los propios profesionales, como desde el gremio de médicos CICOP, se hizo público el malestar por la medida.

En efecto, muchas de las notificaciones de traslado -que estarían afectando fundamentalmente al personal no full time- fueron finalmente firmadas en disconformidad, a la espera de una resolución conjunta de médicos y auxiliares que se habrían autoconvocado para una asamblea a realizarse durante el próximo fin de semana.

«No hemos sido notificados previamente de nada, y ahora nos venimos a enterar que tenemos que cambiar nuestro lugar de trabajo después de 15 años de tareas en el mismo centro», protestaban durante la mañana algunos de los afectados por la medida.

“Así no se trabaja”

Consultado por NUEVA ERA el titular del gremio que reúne a los profesionales médicos municipales, el doctor Pablo Díaz Cisneros hizo pública su «perplejidad» por la medida adoptada por el Ejecutivo municipal: «los cambios o traslados, no se pueden hacer así porque sí», advirtió el dirigente.

«Desde esta mañana estamos recibiendo llamados de los afiliados, sorprendidos y disgustados por la medida de la que han sido notificados esta mañana, y según la cual se disponen traslados en la mayoría de las unidades sanitarias, no sólo para el personal profesional, sino para la totalidad de los empleados municipales, por lo que esto también merecerá la actuación del Sindicato de Trabajadores Municipales», detalló el médico.

«Aparentemente, desde el Ejecutivo estarían aduciendo la necesidad de ‘mejorar’ la situación de los centros de salud, pero esto no es así. Así no se trabaja y esta decisión ha generado una profunda molestia en todos lados, porque los traslados no se fundamentan en una sanción o en una denuncia, o una queja contra el personal que se traslada».

«Acá estamos en presencia de médicos y auxiliares que hace -en algunos casos- hasta 20 años que desempeñan tareas en un lugar y de un momento para el otro, deben empezar de ‘cero’, porque lo que hay que tener en cuenta es que un médico de las características de los que trabajan en los centros de salud, como son los especialistas en medicina general, o familiar, tienen una muy especial vinculación con sus pacientes y con su entorno», enumeró Díaz Cisneros.

«Los pacientes, sus familias y los vecinos de los centros de salud forma un entramado que va mucho más allá de un número de historia clínica que mañana toma otro profesional y lo empieza a atender. Las necesidades de los pacientes son subjetivas y lleva mucho tiempo construir esa relación con la institución de salud para que de un día para el otro, todo se modifique».

«No entendemos la medida, más allá de que todavía no contamos con la documentación y de que más tarde surjan todas las explicaciones técnicas que quieran dar. ¿Por qué van a cambiar de lugar de trabajo a gente que está trabajando bien?».

«Porque si el caso es que están trabajando mal, o hay alguna denuncia o queja, que se sigan los pasos administrativos correspondientes» y definió: «como en tantos otros temas, las políticas de salud, deben ser aportadas por consenso, no se puede pasar por encima de gente que hace 10, 15 ó 20 años que cumplen tareas».

“Optimización” anunciada

Semanas atrás, y junto a diversos anuncios en materia de política sanitaria, desde la cartera a cargo de Luciano Grasso, se había desmentido la posible incorporación de profesionales para el sistema de atención primaria, aunque sí se señaló la posibilidad de «optimizar» el trabajo en las salas.

En ese sentido, se había adelantado la posibilidad de que en algunas de las salas con mayor demanda, se verificaran refuerzos profesionales o de auxiliares, así como una revisión de la estructura de todos los centros.