El listado estaba frenado en la Legislatura provincial entre tironeos por nombres del Departamento Judicial de La Matanza; se activó una negociación entre el ministro Mena y Magario
Javier Fuego Simondet
El listado de candidatos a jueces, fiscales y defensores oficiales de la provincia de Buenos Aires se había trabado en las oficinas del Senado bonaerense, afectado por la tensión interna entre La Cámpora y los sectores que apoyan al gobernador Axel Kicillof. La situación se destrabó luego de una semana, con negociaciones en las que participaron la vicegobernadora Verónica Magario y el ministro de Justicia, Martín Mena, cercano a Cristina Kirchner. El titular de la comisión que debe tratar las candidaturas le había pedido por carta a Magario que girara los pliegos. Había diferencias por candidatos para el Departamento Judicial La Matanza.
En los últimos días, fuentes del oficialismo y de la oposición bonaerense admitían un escenario complejo que evitaba el avance del proceso de selección de los magistrados, más de 130, algunos de ellos apuntados por opositores, y otros, con vínculos de parentesco con dirigentes políticos.
“Es la pelea La Cámpora-Axel. Íbamos a tomar entrevistas esta semana, pero podríamos hacerlo la semana que viene”, afirmó a LA NACION un legislador bonaerense que señaló que el desacuerdo estaba centrado en algunos nombres del Departamento Judicial La Matanza, territorio en el que gobernó Magario y donde continúa en el poder la misma línea política, con Fernando Espinoza al frente.
Con las diferencias planteadas por Magario sobre candidatos para el Departamento Judicial La Matanza, una reunión entre ella y el ministro de Justicia provincial destrabó la situación y el trámite legislativo en el Senado se activará. Al menos tres fuentes de distintos sectores políticos bonaerenses confirmaron a LA NACION ese diálogo entre la vicegobernadora y Mena.
Según pudo confirmar este diario, en el transcurso de la semana el senador camporista Emmanuel González Santalla, presidente de la Comisión de Asuntos Constitucionales y Acuerdos del Senado, le pidió por carta a la vicegobernadora Magario, titular de la Cámara alta provincial, que enviara los pliegos a la comisión que preside.
“Hay una única causa que se evidencia en proyectos como el de góndolas, el aumento de indemnizaciones, que es la interna. Kicillof les da IOMA, el IPS [Instituto de Previsión Social] y ministerios a sus enemigos de La Cámpora, en vez de empobrecerlos. Magario frenó los pliegos en su despacho”, sostuvo un dirigente opositor que conoce el trámite de los candidatos a magistrados. “La oposición está con voluntad de votar los pliegos”, indicó una fuente peronista. En la conformación del listado, confluyen los intereses del peronismo, de la UCR y de Pro, los sectores mayoritarios de la Legislatura bonaerense.
En el gobierno provincial consideraron que la situación de los pliegos no era de parálisis en el Senado, sino que se estaba produciendo una “rosca de la Legislatura” habitual. En la misma tesitura se expresaron tanto fuentes cercanas a Kicillof como a Magario. En cambio, en la oposición y en el camporismo afirmaban al mismo tiempo que la situación se había “destrabado” este jueves.
Hace una semana, Kicillof envió al Senado 129 pliegos de jueces, fiscales y defensores oficiales para los departamentos judiciales de Avellaneda-Lanús, Azul, Bahía Blanca, Junín, La Matanza, La Plata, Lomas de Zamora, Mar del Plata, Mercedes, Merlo, Moreno-General Rodríguez, Morón, Necochea, Pergamino, San Isidro, San Martín, San Nicolás y Trenque Lauquen. Para habilitar el trámite, el número de postulantes se habría elevado a 138, según informó el sitio web Diputados Bonaerenses, con nuevos postulantes en La Matanza y Azul.
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