La vicepresidenta encabezó una cena en Ensenada con dirigentes kirchneristas, en un complejo municipal que lleva su nombre; ante camporistas, intendentes, legisladores y sindicalistas de su núcleo duro ordenó hacer valer el peso político del espacio y “salir a militar”
Horas después de conocerse el fallo en el juicio del caso Vialidad, por el que fue condenada a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ocupar cargos públicos, la vicepresidenta Cristina Kirchner reunió a buena parte de los dirigentes bonaerenses más cercanos a ella. Con el veredicto y su anuncio de que no será candidata “a nada” en 2023, la exmandataria habló en una cena que se llevó a cabo en Punta Lara, partido de Ensenada, distrito que gobierna Mario Secco, uno de los intendentes más kirchneristas, y le pidió a su tropa “tomar el bastón de mariscal”. La escucharon, entre otros, Axel Kicillof, Máximo Kirchner y Eduardo “Wado” de Pedro.
Según declaró Kicillof, la vicepresidenta les dijo (parafraseando un discurso de Juan Domingo Perón): “Llevan el bastón de mariscal en la mochila, empúñenlo”. El mandatario consideró, en declaraciones a Radio El Destape, que la reunión ”fue un llamado al activismo para que se entienda la importancia que tiene una proscripción al peronismo y a la persona más importante del peronismo”.
“Cristina fue muy concreta. Nos dijo: ustedes son peronistas, así que saquen el bastón de mariscal”, afirmó a la Agencia Télam el ministro de Trabajo de la provincia de Buenos Aires, Walter Correa, que fue otro de los presentes en Punta Lara. “Tenemos el Poder Ejecutivo, diputados, senadores, gobernadores, intendentes, dirigentes sindicales: hagamos lo que tengamos hacer para defender la patria. Ahora nos llegó el momento; hay que pelearla en la calle, militar, hacer política -añadió Correa-. Nos dijo a su núcleo duro: agarren el bastón y vayan”.
Secco, anfitrión del encuentro, sostuvo que vio a la expresidenta “como siempre, con capacidad para enfrentar los problemas de la Argentina”, y que en la cena “estaba lo mejor de la dirigencia kirchnerista, todos los compañeros que tenían que estar”.
ES SOLO LA PRIMERA CONDENA
En el encuentro participaron también los camporistas Andrés “Cuervo” Larroque; el jefe de la AFIP, Carlos Castagneto; la directora ejecutiva de Anses, Fernanda Raverta; Cristina Álvarez Rodríguez (ministra de Gobierno bonaerense); los intendentes Jorge Ferraresi (Avellaneda), Mayra Mendoza (Quilmes), Fabián Cagliardi (Berisso), Pablo Zurro (Pehuajó) y Gustavo Barrera (Villa Gesell); sindicalistas como Roberto Baradel (Suteba), Sergio Palazzo (La Bancaria), Abel Furlán (UOM), Mario “Paco” Manrique (Smata) y Omar Plaini (canillitas), y legisladores nacionales y provinciales, como Carlos Heller, Vanesa Siley, Leopoldo Moreau, Teresa García y César Valicenti. Completaron el mapa cristinista en la reunión dirigentes como Martín Sabbatella (Acumar), Florencia Saintout (Instituto Cultural bonaerense) y Diana Conti (comisionada del Comité Nacional de Prevención de la Tortura), entre otros.
Mayra Mendoza dijo a Radio Con Vos que Cristina “escuchó más que hablar ella”, y que “planteó praxis peronista” al citar a Perón. “Dijo que, con el bastón de mariscal que todos tenemos, nos hagamos cargo de salir a representar a nuestro pueblo y de trabajar para devolverle la vida con dignidad a la gente”, afirmó la intendenta de Quilmes.
“No le podemos pedir más a ella”, dijo Mendoza en sus declaraciones radiales. “Hay muchos dirigentes políticos dentro de este frente al que pertenecemos que se quedaban tranquilos con la posibilidad de que Cristina fuera candidata. Hay que dejar de pedirle y de vivir de los beneficios que tiene Cristina en términos electorales”, completó la intendenta de Quilmes.
El mensaje interno de Cristina en la cena fue leído por fuentes cercanas a los comensales como una arenga a militar tras su anuncio de darse de baja de las candidaturas.
“Tenemos gobernadores, intendentes, concejales, legisladores, mayoría en la Cámara de Senadores, tenemos el Poder Ejecutivo y, sin embargo, no pudimos evitar que salga esta condena que no se condice en nada con la realidad de lo que ocurrió”, lamentó el intendente Barrera, en declaraciones que reprodujo la Agencia Télam.
La reunión se realizó en un predio que lleva el nombre de la vicepresidenta, el Complejo Recreativo Cristina Fernández de Kirchner, que la Municipalidad de Ensenada tiene en la costa de Punta Lara y que Secco inauguró en enero.
Según pudo saber LA NACION, el encuentro fue uno más en una serie de citas que este grupo de perfil kirchnerista sostiene periódicamente, al menos una vez por mes. Una fuente al tanto de lo sucedido confió que la presencia de la vicepresidenta no fue sorpresiva y que era una participación que se preveía como posible.
Ensenada es un escenario repetido para las reuniones de este conglomerado de paladar cristinista. Según pudo reconstuir este diario, los encuentros se desarrollan con algunas presencias que se repiten y otras que van rotando, desde hace ya varios meses.
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