Hay gremios que piden más del 30%, como es el caso de Alimentación. Comercio no logró cerrar el convenio.
En el gremio no quisieron adelantar qué incremento salarial pretenden pedirle a la cámara patronal. Pero trascendió que a principios de la semana que viene habrá un congreso en el que la seccional Capital Federal y conurbano del gremio definirá su reclamo. La posición de algunos dirigentes es que en la paritaria de este año se debe alcanzar un salario inicial de $ 9.000.
En la actualidad el salario inicial de la actividad es de $ 6.300, con lo que la suba que pretendería el sindicato es del 42,85%. El sindicato de la Alimentación no integra la CGT oficialista ni la opositora.
“La realidad marca que la expectativa inflacionaria para este año está muy por arriba del 30 % y nosotros debemos preservar el poder adquisitivo de los trabajadores”, dijo un dirigente del Sindicato de la Alimentación. Y agregó: “El sector tiene una muy alta rentabilidad, con lo que está en condiciones de dar el aumento que pediremos”.
Un argumento que el sector empresario esgrime habitualmente en las paritarias es que si se compara con México, Brasil y otros países de la región, aquí los salarios en dólares son demasiado elevados y le quita competitividad a la industria de la alimentación local.
“Vivimos en Argentina y el costo de vida es en Argentina. Nosotros pelearemos por los salarios en Argentina”, argumentó un sindicalista.
Ayer, por otro lado, inesperadamente se trabó la paritaria mercantil. El Sindicato de Comercio y las dos entidades empresarias, la CAME y la Cámara de Comercio, venían discutiendo una propuesta elaborada por el Ministerio de Trabajo: una suba del 15% en abril, más otra del 10% en julio y el pago de $ 3.000 en dos cuotas.
Lo que empantanó la negociación fue que el gremio exige que las subas sean acumulativas, con lo que el aumento en dos tramos sería por el 26,5%. “Si a eso se le agregan los $ 3.000 el incremento alcanza casi el 31%, un porcentaje inaceptable para nosotros”, dijeron en una cámara patronal.
Tampoco hubo acuerdo acerca de en qué meses se debería abonar la suma extraordinaria. Hubo, además, un reclamo de última hora del gremio de subas de los adicionales de las cajeras de supermercados y clarkistas. Las negociaciones continuarán mañana.
El titular del gremio mercantil, Armando Cavalieri, contó detalles de su paritaria en la reunión que la “mesa chica” de la CGT oficialista tuvo ayer en UPCN. Además del dueño de casa, Andrés Rodríguez, participaron los sindicalistas José Luis Lingeri, Héctor Daer, Oscar Romero, Jorge Lobais, Antonio Caló, Sergio Sassia y Hugo Ferreira. Hubo consenso entre diferentes dirigentes en que buscarán el adelantamiento de sus negociaciones paritarias para cobrar lo antes posible aumentos salariales que compensen la alta inflación.
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