Cristina Kirchner inaugurará esta tarde las “Torres Gemelas” de Santiago del Estero, una mega construcción en pleno centro de la capital provincial, que ha sido y es objeto de controversias, críticas y que nadie a ciencia cierta sabe cuánto ha costado, aunque se calcula en unos 600 millones de pesos.

La Presidenta visitará la provincia y se mostrará junto a la gobernadora Claudia Ledesma Abdala y su marido Gerardo Zamora, justo antes de las elecciones municipales del próximo domingo, donde el oficialismo buscará arrebatar el control de las ciudades que gobierna la oposición utilizando todos los métodos a su alcance. 

Las ostentosas “Torres Gemelas” serán las sedes de los ministerios de Economía y Educación. Son dos imponentes edificios de 24 y 18 pisos con la fachada completamente vidriada, de ahí el nombre con el que se las conoce popularmente, además de su estilo Manhattan. 

De los pisos superiores, cuentan los santiagueños, pueden verse los barrios más humildes de la ciudad. Es que los Zamora no tienen problemas en inclinarse por hacer mega construcciones en detrimento de resolver los problemas estructurales de la provincia, como la falta de agua potable, cloacas o del tendido de la red de electricidad. 

El presupuesto inicial para la construcción de los nuevos ministerios fue de 321 millones de pesos. Pero tanto Zamora como su esposa fueron decretando ampliaciones presupuestarias que elevaron el costo hasta al menos 560 millones de pesos, aunque el dato no es oficial y surge del cálculo de quienes siguieron el tema como el portal Última Hora Diario.

 De todos modos, los 560 millones quizás no sean suficientes: fuentes de la provincia consultadas por LPO aseguraron hoy que el edificio no está terminado. En principio, lo que se hizo para esperar a Cristina es quitar el vallado perimetral de obra y terminar a contrarreloj de colocar el vidriado en los pisos superiores.

 Las “ampliaciones presupuestarias” han sido constantes desde 2011. Por caso, en los últimos meses fueron al menos cuatro, dos de ellas en la misma semana. En junio, se publicó en el Boletín Oficial una ampliación de 7 millones de pesos (decreto 1130), similar a una de marzo por el mismo monto. En la última semana de julio, Abdala firmó el decreto 1438 e incrementó en 9 millones el presupuesto. Días después agregó otros 30 millones a la cuenta (decreto 1618).

Pero eso no es todo. La cuenta podría ser mayor. Por un error en los estudios previos, el edificio no contará con los cuatro subsuelos de cocheras que se había previsto en el proyecto inicial ya que correría riesgo de hundimiento. Así, Zamora amplió en 2012 el proyecto y determinó la construcción de cocheras en un terreno que expropió a la Sociedad Italiana. Además, en noviembre de 2013, Julio De Vido y Zamora anunciaron la construcción de un edificio anexo donde funcionará la Caja Social. El costo será de 160 millones de pesos.

El sistema de las pequeñas ampliaciones presupuestarias es un clásico de la gestión Zamora. Así, también es un misterio el valor final de la construcción del autódromo de Termas del Río Hondo, el más moderno del país. Según los cálculos iniciales, se habrían desembolsado más de mil millones de pesos, pero no se descarta que la cifra sea mucho mayor.

 El mismo mecanismo de ampliaciones presupuestarias se usó en el nunca terminado “Tren al Desarrollo” que une Santiago con La Banda (pasó de 125 millones a 240 millones, el Forum donde hoy Cristina entregará viviendas, la Terminal de Ómnibus de la capital y el aeropuerto de Termas de Río Hondo. 

Esta última es un caso paradigmático. Habría costado 240 millones de pesos. Lo curioso es que está ubicado a apenas 70 kilómetros del aeropuerto de Santiago y a 90 kilómetros del de Tucumán. A Santiago hay un vuelo diario desde Aeroparque, pero para activar el de Termas se cambiaron tres vuelos semanales. 

El papelón mayor se dio meses atrás cuando se corrió el Moto GP en el autódromo de Termas y los aviones de mayor porte que trajeron los equipos internacionales no pudieron aterrizar allí por las dimensiones de la pista y debieron desviar a Tucumán.

Contrastes 

Toda la ostentación de la fenomenal obra pública santiagueña choca con los datos de pobreza de la provincia. Por caso, Santiago del Estero tiene un déficit habitacional del 46,7% y una población rural del 39%. El ex senador Emilio Rached habló en una reciente entrevista de 77 mil viviendas rancho. 

En algunas ciudades del interior provincial, las más castigadas por la pobreza, hay hasta un 80 por ciento de familias sin agua potable. El 81 por ciento de la población de toda la provincia no tiene cloacas, y otro tanto carece de electricidad y ni gas natural.

 Un reciente informe de Jorge Lanata dio cuenta de un 50 por ciento de pobreza en la provincia, de acuerdo a datos de la consultora de Claudio Lozano. Además, Santiago registra un 68 por ciento de pobreza infantil y 32 por ciento de indigencia infantil. 

Sospechas con De Vido 

La empresa que construyó las “Torres Gemelas” es Panedile. Se trata de una firma propiedad de Hugo Dragonetti que desde 2003 tuvo un vertiginoso crecimiento, con especial presencia en Santiago del Estero. El año pasado, el diario Perfil la vinculó con el ministro de Planificación Julio De Vido, algo que la empresa se encargó de desmentir. 

Una fuente santiagueña le dijo sin dudar a LPO: “Panedile es De Vido”. Y recordó que la empresa no sólo fue favorecida con la construcción de las “Torres Gemelas”, sino también del Dique Figueroa, una obra que tuvo graves fallas y que no solucionó ni mucho menos los problemas de acceso al agua de las poblaciones cercanas. Panedile también construyó la red cloacal en Termas de Río Hondo. 

Días atrás, el diputado nacional Alberto Asseff presentó un pedido de informes para exigir información al gobierno de Santiago del Estero sobre indicadores sociales, los gastos en las obras mencionadas, y la relación del gobierno provincial con algunas empresas contratistas como Panedile, a la que menciona como “ganadora habitual” de licitaciones. 

Otra empresa que se menciona es Mijovi SRL, propiedad de José Alberto Sarquiz y que construyó el autódromo de Termas de Río Hondo. Ambas participaron además en diversas obras hídricas y viales, y esta última tendría a su cargo la construcción del Parque Tecnológico de La Banda, el Tecnópolis santiagueño.