El Predio de Disposición Final de Residuos sigue siendo un tema de discusión en Mar del Plata por la falta de algunas políticas concretas para evitar situaciones que suceden alrededor de lo que vulgarmente se conoce como «basural».

La concejal Sol de la Torre del Frente de Todos estuvo planteando ir a ver la situación del predio sin respuesta del gobierno de Guillermo Montenegro. En declaraciones a la 99.9 la edil señaló que «desde que asumí en el Concejo Deliberante, venimos pidiendo que la Comisión de Ambiente funcione en el Predio al menos una vez para ver que situación hay ahí. Todo se empezó a agudizar cuando vimos que no había planificación luego de que se terminar el contrato con el CEAMSE. Hace 5 meses que se retiró y la administración no viene siendo la correcta».

Luego de que el CEAMSE dejó de trabajar allí, sucedieron otros hechos que inquietan a la oposición: «se realizaron tres contrataciones directas a tres empresas distintas sin pliego licitatorio y sin mediar emergencia ambiental. Nos dijeron que era una situación permitida por el Tribunal de Cuentas y en breve, entraría el nuevo pliego para que sea una UTE la que lo administre. Eso fue en junio del año pasado. Lo que hice entonces fue acercarme al predio para ver como estaba, corroborando que lo que parece una sierra parquizada, desde el camino interno es una montaña de basura sobre una estructura colapsada. Si esto se sostiene en el tiempo, habrá un colapso».

Las obras que se necesitaban hacer, nunca se llevaron adelante según lo que indicó De la Torre y están reclamando que haya políticas concretas con una mirada social: «hay obras comprometidas hace 3 años, el 30 de septiembre del año pasado Sebastián D´Andrea me dijo que la obra de la construcción de la base que genera un nuevo relleno estaba próxima a terminarse pero nunca se finalizó. Es momento de explorar y poner en marcha pruebas pilotos de nuevos sistemas de tratamiento de residuos. Hay que retomar el camino de la separación en origen que nos permitiría trabajar el compostaje a gran escala. La clave es pensarlo como una política integral con inclusión social».

Lo que se recicla en Mar del Plata es gracias a esa comunidad excluida que son los cartoneros. Si ellos no vivieran de esos residuos, en vez de estar enterrando 1.400 toneladas diarias, estaríamos enterrando quizás 2 mil toneladas.