Todos los entretelones de lo que es noticia en Mar del Plata.
Llegó la hora de la verdad. Este domingo marplatenses y batanenses concurrirán a las urnas para elegir al nuevo intendente de la ciudad (décima oportunidad desde 1983), en lo que no será una elección más. Prueba de ello es que entre miércoles y jueves estarán en la ciudad quienes gobernarán la provincia y la Nación durante los próximos cuatro años. Mar del Plata es un distrito emblemático, y el triunfo en la ciudad preferida por los argentinos es una medalla que querrán lucir desde el lunes tanto en el Frente de Todos como en Juntos por el Cambio.
Mañana, el presidente Mauricio Macri y la gobernadora María Eugenia Vidal, quienes van por la reelección, serán las máximas figuras políticas que encabezarán la “Marcha por el #Sí, se puede”, en Mar del Plata y con fondo de mar. Será a las 18 en Luro y la costa. Un día después desembarcará el Frente de Todos para cerrar aquí la campaña electoral. Alberto Fernández, Cristina, Axel Kicillof, los gobernadores y los máximos popes de esa fuerza tendrán su acto ante una multitud en la Rambla. Que a horas de los comicios Mar del Plata se convierta en el epicentro de la política argentina es un hecho que registra muy escasos antecedentes. Es que la contienda local también atrae la atención del llamado “círculo rojo” argentino.
Por ello, también tendrán su foto especial los principales candidatos locales. Fernanda Raverta, quien como si fuese un mantra repite su consigna acerca del trabajo mancomunado entre municipio, provincia y Nación, reforzará con esa imagen el pedido para que no haya corte de boleta. Guillermo Montenegro, en tanto, también jugará sus últimas cartas junto a quien fue la principal impulsora de su candidatura (Vidal) y a Macri, envalentonado tras la importante adhesión que tuvo la marcha del sábado a la tarde en Mar del Plata. En tanto, Gustavo Pulti se mostrará en otra foto, diferenciándose y multiplicando esfuerzos con su boleta corta “con los marplatenses y batanenses” en busca de su tercer mandato. Hoy los encuestadores “serios” no se animan a adelantar quién se quedará con el triunfo en Mar del Plata. Será una elección apasionante y todo parece indicar que entre el primero y el segundo podría registrarse la diferencia más estrecha de la historia de los comicios locales.
Los candidatos a intendente, sin sus figuras nacionales, tuvieron además la posibilidad de debatir y dar a conocer sus propuestas en sendos programas televisivos, tanto en Canal 10 como en Canal 8. Los protagonistas excluyentes volvieron a ser coincidentemente quienes encabezan las encuestas: Raverta, Montenegro y Pulti. El viernes, el intendente Arroyo, sobreactuando claramente y fuera de contexto, intentó atacar tanto a Pulti como a Montenegro. Lo frenaron ambos tanto al aire como en la tanda, y se sepultó así la posibilidad de que el “lord mayor” hiciera el trabajo sucio contra dos de los candidatos. Es que preocupado por lograr que le custodien las boletas en los comicios del domingo -no cuenta con fiscales para cubrir la totalidad de las mesas pese al pedido de colaboración a sus ex alumnos- e ilusionándose con que entre el 28 de octubre y el 10 de diciembre pueda lograr hacer nombrar a dos jueces de Faltas de su riñón, cediendo el tercero (Juzgado 6, a crearse, con personal incluido) a cuenta de votos en el Concejo, Arroyo quiso hacer bien los deberes. Sigue desconociendo la realidad y disociado de lo que le marcaron las urnas, cuando en las recientes PASO, el 95% de la ciudadanía le bajó el pulgar. “Esta ha sido la gestión más importante de la historia local” o “la ciudad tiene prácticamente un sólo candidato: yo”, fueron dos frases recientes que lanzó el hombre de la Agrupación Atlántica y que pasan a formar parte del nutrido anecdotario de risueños dichos del jefe comunal.
En cuanto a los debates, fue unánime el respaldo de todos los candidatos -menos Arroyo- a los docentes municipales, a quienes esta gestión les quitó la histórica bonificación que recibían. El compromiso de los hombres y mujeres que anhelan convertirse en próximo intendente/a es el de restablecer dichas bonificaciones a partir del 10 de diciembre, al margen de la decisión que adopte la Corte en la causa presentada por el Ejecutivo y que ya genera inquietudes en cuanto a las consecuencias judiciales y patrimoniales que podría acarrear un fallo adverso a la posición esgrimida por el intendente.
En tanto, sobre los mensajes de los candidatos en los debates, Fernanda Raverta prometió bajarse el sueldo de convertirse en intendenta (actualmente es de 400 mil pesos “en bruto”) y reducir la planta política, en lo que coincidió Guillermo Montenegro, quien hizo hincapié además en sus planes en materia de seguridad. Gustavo Pulti insistió en la necesidad de conformar un gobierno de unidad, con eje en la preocupación por el trabajo. También en la falta de trabajo (Mar del Plata lidera el ranking nacional de desocupación) se mostró interesado Santiago Bonifatti. “Mar del Plata necesita el gobierno de todos los trabajadores en todos los aspectos”, recalcó Alejandro Martínez, mientras que Carlos Arroyo dijo que logró tener un municipio ordenado y sustentable. Finalmente, Marisa Zizmond levantó la bandera contra el aborto, y también propuso estimular la inversión para que aumente la demanda de trabajo.
En otro aspecto, el intendente Arroyo se va despidiendo de su ciclo como intendente, con un tarifazo en las tasas municipales que golpea duro en vastos sectores de la comunidad. “De prometer hace cuatro años que iba a bajar las tasas a mandar dos vencimientos un mismo mes, demuestra la incapacidad de quienes condujeron este municipio durante cuatro años”, expresaba un concejal opositor en las oficinas de la Defensoría del Pueblo. Allí, los responsables de la Defensoría advirtieron que hay casos en que las boletas que llegan tras la suba aprobada el mes pasado “alcanzan hasta un 250% de incremento”. “Muchos marplatenses llegan hasta nuestra oficina diciendo que a la hora de afrontar los gastos tienen que elegir si pagan la luz, el gas o dejar de comer. Además les han llegado cuatro boletas para pagar en sólo tres meses”, denunciaron los defensores Fernando Rizzi, Luis Salomon y Daniel Barragán. También el titular de la Agencia de Recaudación Municipal (ARM) tomó distancia de la decisión del municipio de enviar cuatro vencimientos de la TSU en los últimos tres meses del año, lo cual ha generado el lógico y entendible malestar de los contribuyentes.
Gran trabajo realizaron los colegas de Canal 8 y Canal 10 en los debates de la semana anterior. Y entre los periodistas de distintos medios que estuvieron cubriendo lo sucedido en ambos estudios se produjeron jugosos diálogos. Uno de los más veteranos confesó que tiene la letra chica del acuerdo alcanzado entre dos candidatos a intendente para repartirse tres juzgados de Faltas, antes de que asuman las nuevas autoridades (el pacto menos pensado, dijo) mientras que otro de los presentes sostuvo que debería ser obligatorio que ante cada elección debatan los candidatos a intendente. “Así, quizás los votantes hace cuatro años hubiesen conocido antes de votarlo a Arroyo, quien no quiso presentarse a ningún debate”, explicó. En tanto, el asesor principal de uno de los candidatos a intendente dijo que su preocupación pasa por los 44 días que correrán entre el 27 de octubre y el 10 de diciembre, fecha de asunción de las nuevas autoridades. “Va a ser necesario una transición con control. En estos días comienza el festival de designaciones, ascensos, pases a planta permanente y búsqueda de espacios para muchos hombres y mujeres de la planta política de este gobierno que no tienen dónde ir a trabajar el próximo año . Y todo eso hay que frenarlo porque económicamente este municipio no resiste medio nombramiento más”, confió, café ya helado en mano.
También se hablaba en la previa de los debates, acerca del conflicto que se vivió con el pago a los 254 asesores del Concejo Deliberante. Tras el ajuste del 30 por ciento y la reducción de módulos de concejales, se ahorrarán cinco millones de pesos por mes hasta fin de año, tras haberse “agotado” el presupuesto anual para el funcionamiento del cuerpo deliberativo. “Hay bronca entre distintos concejales porque acá hay algunos que tienen coronita y en estos cuatro años se hicieron de mucha guita. Son los mismos que ahora quieren pasar a planta permanente a 40 asesores. Una locura”, se quejó una concejal que cree que así como con la próxima gestión llegará el recorte de sueldos del intendente y sus funcionarios deberán transparentarse y reducirse también los ingresos tanto de los concejales como de sus asesores. “Quien asuma como intendente no podrá hacerse el distraído con este tema”, reveló. ¿Habrá voluntad política como para encarar un tema tan sensible a partir del 10 de diciembre?
Uno de los periodistas, tras el debate del viernes, invitó a continuar la charla informal de colegas a una cervecería, donde se lució aportando datos históricos sobre los comicios marplatenses. Pero antes tiró un dato fuerte: se vienen novedades explosivas en torno al conflicto de Playa Grande, concretamente del estacionamiento donde quieren habilitar un boliche bailable. Luego sí entró de lleno en el tema elecciones. El domingo, refirió abriendo su libreta roja, será la 30ª vez que los marplatenses concurrirán a votar desde 1983. Además de elecciones legislativas y presidenciales, se incluyen el plebiscito del Beagle en 1984, la consulta por la reforma constitucional de la provincia en 1990, el plebiscito por la reelección de Duhalde (1994) y la consulta por las 25 obras de Aprile, el 12 de mayo de 1996. “Mi viejo creo que hasta el ’83 había votado dos o tres veces en su vida”, recordó.
El domingo, 13.146 días o si se quiere, casi 36 años después de haber sido elegido Angel Roig como primer intendente de la nueva etapa democrática, el 30 de octubre de 1983, 573.174 personas en el Partido de General Pueyrredon estarán en condiciones de elegir jefe comunal por décima vez entre siete candidatos. Seis fueron los intendentes elegidos hasta hoy en nueve comicios, tres de ellos radicales. Roig, Aprile y Katz (UCR), Mario Russak, Gustavo Pulti y Carlos Arroyo fueron los ocupantes del principal despacho municipal. El domingo habrá dos candidatos a intendente más que en 2015, cuando se presentaron Carlos Arroyo, Gustavo Pulti, Pablo Faría, Lucas Fiorini y Alejandro Martínez. Esta vez, tres volverán a presentarse (Pulti, Arroyo y Martínez) y cuatro debutarán en su candidatura al máximo cargo local, tales los casos de Fernanda Raverta, Guillermo Montenegro, Marisa Zizmond y Santiago Bonifatti.
Carlos Arroyo es el único de los políticos que participarán de las elecciones del domingo, que intervino en aquella primera edición de 1983. Fue candidato a intendente por la Alianza Federal y terminó en el 14° lugar, con 1.411 votos. El actual jefe comunal participó en 16 procesos electorales, por nueve fuerzas políticas diferentes. Desde el triunfo en octubre de 2015 a las PASO de agosto último perdió 163.275 votos, 120 por día, cinco por cada hora. Se le esfumó nada más y nada menos que el 87,5% de su capital de votos. Sólo pudo contener al 12,5% de sus electores de cuatro años atrás.
Fernanda Raverta se encuentra ante una posibilidad histórica ya que el justicialismo nunca ganó en comicios para intendente en General Pueyrredon, desde 1983. Cuando más cerca estuvo fue en 1995. Se impuso el radical Blas Aurelio Primo Aprile, con 114.144 votos, mientras que el doctor Julio César Pettigiani logró 98.546. En síntesis, 15.598 votos menos. En los comicios a intendente, desde 1983 a la actualidad, quien ganó con menor porcentaje de votos fue Angel Roig, en su reelección el 6 de setiembre de 1987, cuando logró el 29,7% del total. Quien más votos obtuvo en un comicio fue el radical Elio Aprile, con el 61% en las generales del 14 de mayo de 1995. Además, marcó otro récord: gracias a esa victoria ingresaron al Concejo 8 hombres de su lista sobre un total de 12 en juego.
Doce años atrás, el 28 de octubre de 2007, Gustavo Pulti lograba su primer triunfo como candidato a intendente. Obtenía el 33,95% de los votos, 104.468 adhesiones. Se presentó por primera vez en 1999 y salió tercero. En 2011 volvió a ser elegido intendente. La reelección la logró con el 39,26% de los votos. Ahora buscará su tercer mandato, esta vez con boleta corta.
La diferencia histórica más estrecha entre los dos primeros lugares fue de 5,4 puntos, lo cual se registró en dos oportunidades. En 1991 Mario Russak logró el 29,9% contra el 24,5 de Juan Garivoto. Cuatro años más tarde, Elio Aprile llegó al 39,2% contra el 33,8% de Julio Pettigiani. La diferencia más amplia se dio en 1999, cuando Elio Aprile le sacó 45 puntos de diferencia a Adrián Freijo (61% a 16%). Si se toman en cuenta las nueve elecciones a intendente desarrolladas hasta la fecha, el promedio de votos obtenidos por el ganador fue del 42,1%, o 117.306 sufragios.
Los intentos de Vilma. Hace algunos meses, Vilma Baragiola aparecía como la gran candidata a suceder al actual intendente, pero nuevamente sus sueños se vieron frustrados. Haciendo un poco de historia puede recordarse que el 26 de octubre de 2013 se realizaban los comicios legislativos, obteniendo una victoria arrasadora Vilma Baragiola, del Frente Progresista Cívico y Social, con el 30,48 de los votos (114.379 adhesiones), casi duplicando los 66.008 votos de Acción Marplatense (Jorge Ferro), quien llegaba al 17,59%. Con Vilma Baragiola perfilada como la gran candidata a reemplazar a Gustavo Pulti en la intendencia transcurrieron casi dos años hasta las PASO del 9 de agosto de 2015. Allí se produciría la lucha de Vilma Baragiola y Carlos Arroyo. Sólo uno seguiría en camino. Y el ganador fue Carlos Arroyo, quien sorprendió no sólo dejando fuera de carrera a la candidata radical, sino también imponiéndose al intendente Gustavo Pulti. Una de las notas salientes de los comicios registrados semanas más tarde fue que por primera vez, desde 1983, la Unión Cívica Radical no tuvo candidato a intendente en General Pueyrredon. En democracia, de 8 elecciones, el radicalismo se había impuesto hasta allí en cinco oportunidades.
En las últimas PASO de agosto se definió la candidatura de la alianza Juntos por el Cambio con Guillermo Montenegro, quien volvió a frustrar el gran objetivo de la radical Vilma Baragiola de convertirse en la primera intendenta de la historia de la ciudad. La candidata más votada fue Fernanda Raverta (Frente de Todos), quien obtuvo el 28,9% de los sufragios (111.491), mientras que los dos candidatos de Juntos por el Cambio, Montenegro y Vilma Baragiola, llegaron al 36,44% (140.356). En la tabla de candidatos Montenegro quedó segundo, con 21,5% (83.118) y Gustavo Pulti tercero, con 18,3% (70.480). Baragiola, eliminada de la competencia tras caer derrotada ante Montenegro se ubicó cuarta con 14,8% (57.238). En menos de dos años la actual concejal radical perdía 131.291 votos. Tras las PASO, la concejal se llamó a silencio y evitó hacer público su apoyo a Montenegro, como sí lo hizo orgánicamente el partido radical.
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