Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich avisan que no bajan sus postulaciones en caso que el expresidente deje de actuar como candidato para las elecciones de 2023 y confirme que va por lo que llama el segundo tiempo: su segunda presidencia. Cómo se ordena la interna y los riesgos de fracturar a la principal alianza opositora.
Por Ezequiel Rudman
“Lo mejor que le podría pasar a Horacio es que Macri sea candidato”. Un ex ministro del gabinete de Mauricio Macri enfoca la vista en el vacío sentado en una confitería sobre la avenida Figueroa Alcorta. Su análisis parte de la licuación del volúmen político de la candidatura de Horacio Rodríguez Larreta. “Si Macri finalmente se define como candidato presidencial, Horacio se convertiría en el líder de un frente anti Macri dentro de Juntos por el Cambio, con apoyo de la UCR de Gerardo Morales y de las demás fuerzas políticas”, completa el funcionario que integró la mesa chica del poder durante la gestión Cambiemos.
La indefinición de Macri, su zigzagueo político constante, altera a halcones y palomas dentro del PRO. Pero también mantiene en vilo al resto de los socios políticos de la principal coalición opositora. Larreta no se baja. Desde Upsallata aseguran que el jefe de gobierno porteño está lanzado con la gestión como principal bandera. Por ahora, y pese a las presiones internas, no se mueve del eje de su campaña de centro, moderada, sin estridencias y con una apuesta a contener a la mayor cantidad de sectores posibles en términos electorales. Desde la UCR de Gerardo Morales y Martín Lousteau hasta la Coalición Cívica de Elisa Carrió, pasando por el peronismo cordobés de Juan Schiaretti -a quien quiere como su jefe de gabinete de Ministros en caso de acceder a la Presidencia en 2023-, el ala evangélica de Cynthia Hotton, el sector liberal de José Luis Espert y hasta aliados de Mauricio Macri. El llamado macrismo sin Macri.
La decisión de Larreta de ser candidato más allá de Macri es leía como un desafío. “Si Mauricio es candidato, Horacio se tiene que bajar y apoyarlo al día siguiente”, brama un operador que trabaja para la ex presidente. Sin embargo, más que un desafío o una traición, tal vez Larreta apueste a ese escenario. Un Macri candidato que lo magnetice como líder de la resistencia interna dentro de Juntos. Al decir del ex ministro de Cambiemos, “un candidatura de Macri le ordenaría la interna a Horacio y lo podría reposicionar como jefe de un frente anti Macri”. El ex presidente comenzó a caminar el conurbano bonaerense, donde se presente el mayor índice de rechazo a su figura. Estuvo en La Matanza, San Miguel e Ituzaingó donde recibió el rigor de algunos vecinos. Sin embargo, la decadencia del Frente de Todos como marca y fuerza política lo anima a seguir caminando. Macri se mueve en la política como un león herido desde que se convirtió en el primer presidente que no logró ser reelecto. Su gobierno le puso la alfombra al regreso de Cristina Fernández de Kirchner al poder con Alberto Fernández como candidato. Demasiada adversidad política para el temperamento de un político con raíces calabresas.
Más allá de su potencial electoral -Macri ostenta el 40% de votos que sacó en 2019 en el ocaso de su gobierno- , su ánimo para recorrer el conurbano y sus críticas públicas a Larreta por ser “dialoguista”, el fundador del PRO no sólo cuenta con la resistencia interna del jefe de gobierno porteño. En el búnker de Patricia Bullrich, donde cada vez se suman más dirigentes y reciben encuestas alentadoras, tampoco están dispuestos a dar un paso al costado en el caso de que Macri se presente a las PASO de Juntos. La ex ministra de Seguridad tampoco está dispuesta a dar marcha atrás con su candidatura presidencial más allá de la decisión que tome Macri. “Sería complicado para el PRO que en la interna de Juntos presentemos tres candidatos”, es el mensaje que envían desde la mesa chica de Bullrich. Es que los principales perjudicados ante una eventual candidatura presidencial de Macri serían Bullrich pero también Jorge Macri. El ex intendente de Vicente López está primer en la línea de largada para suceder a Larreta en la Ciudad de Buenos Aires. En Juntos dudan que una boleta Macri-Macri sea demasiado empalagosa para ele electorado independiente. Sería entonces Patricia quien podría bajar a la Capital Federal como candidata del ex presdiente aunque en su entorno descartan de plano esa posibilidad. A la resistencia interna del PRO se suma el rechazo del jefe del Comité Nacional de la UCR, Gerardo Morales, abiertamente enfrentado a Macri y su política de la grieta.
En el medio de la interna, mientras intentan medir qué impacto tendría una candidatura de Macri, en Juntos todavía analizan cómo se reconfigura el mapa político tras el intento de asesinato contra Cristina Fernández de Kirchner. ¿Es el tiempo de los moderados o el intento de magnicidio le devuelve el escenario el extremismo político?. En el primer caso, Larreta podria emerger como una suerte de pacificador de la oposición en medio de los discursos radicales de Macri y Bullrich. Pero si Fernando Sabag Montiel y la organización que lo rodeaba finalmente terminó reinstalando a Cristina Fernández de Kirchner en la centralidad política, será la hora de los halcones del PRO. Paradójicamente, o no, el Frente de Todos y Juntos por el Cambio se gestan casi en espejo de cara a la carrera presidencial del 2023. Con una opción de centro, Larreta en la oposición y Sergio Massa en el oficialismo, y otra más extremista, Cristina en el FdT y Macri/Patricia en JxC.
Esta semana, Larrreta y Macri protagonizaron otros desencuentro discursivo. El jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, ratificó que “el diálogo es el camino para la Argentina”, y se diferenció de Macri, quien en un reportaje televisivo había asegurado que no creía en esa estrategia. “Yo creo que el diálogo es el camino para la Argentina, tenemos que terminar con las antinomias, con la grieta de que el que piensa diferente es el enemigo”, afirmó Larreta al presentar en el club River Plate un plan de estudios diferenciados para deportistas de alto rendimiento. El jefe de Gobierno respondió así al ser consultado respecto de las declaraciones de Mauricio Macri, quien en un reportaje televisivo el domingo a la noche había afirmado que “no creía” en la estrategia dialoguista del alcalde porteño.
A pesar de que el ex presidente todavía no declaró públicamente cuáles son sus aspiraciones de cara a los comicios del año próximo, en los últimos días comenzaron a crecer los rumores acerca de su posible candidatura presidencial en 2023 a partir del lanzamiento de su segundo libro para fines de octubre . “El libro se llama ¿Para qué? y lo publica Planeta a finales de octubre. No tiene nada que ver con una eventual candidatura suya, es sólo un libro”, precisó el exministro de Cultura de la gestión de Cambiemos, Pablo Avelluto.
El exfuncionario nacional es una de las personas que asesoró a Macri en la redacción del libro, donde el ex mandatario buscó volcar su experiencia en la gestión del Ejecutivo nacional y reflexionar sobre el liderazgo y las motivaciones un jefe de Estado a la hora de proyectar un plan de gobierno. Si bien Macri sigue jugando al misterio sobre su futuro político, a pesar de que en los últimos meses levantó su perfil público y salió de recorrida por el interior de la provincia de Buenos Aires, el lanzamiento de su nuevo libro enciende las luces de alarma dentro de su propio espacio político.
Desde el entorno del jefe de Gobierno porteño afirmaron que no tienen “ninguna consideración en particular” respecto del lanzamiento del libro del exmandatario, pero aclararon que trabajan “con la hipótesis de que Mauricio Macri va a ser precandidato” en 2023. “Falta mucho para las candidaturas, pero la precandidatura de Horacio no va a estar condicionada por nadie. No importa quién se presente también”, subrayaron desde Uspallata. Tano que el jefe de Gobierno porteño se reunió la semana pasada con 150 dirigentes que respaldan su postulación, en un acto en los bosques de Palermo.
En la foto que plasmó el encuentro, Rodríguez Larreta intentó mostrar que tiene candidatos en todas las provincias y que su armado no se concentra solo en la ciudad de Buenos Aires, el territorio que gobierna, y el conurbano. En esa imagen aparecieron, por ejemplo, varios candidatos a las gobernaciones en provincias como Entre Ríos (Rogelio Frigerio), San Luis (Claudio Poggi) y Córdoba (Luis Juez), entre otras. El alcalde porteño también incorporó en la foto a referentes del anterior gobierno de Macri, como el cordobés Gustavo Santos, el excanciller Jorge Faurie y el exministro Hernán Lacunza.
Días anteriores, Rodríguez Larreta se había ocupado del armado bonaerense, al reunirse con representantes de la primera y tercera sección electoral provincial, los distritos del conurbano que aportan más votos por su composición demográfica en la elección nacional. En este encuentro aparecieron varios referentes que estaban jugando hasta ese momento con la candidatura a gobernador de Cristian Ritondo y no con la de Diego Santilli, el alfil de Rodríguez Larreta para la provincia. Los “conversos” que pasaron a las filas de Larreta fueron borrados inmediatamente del grupo de Whatsapp que comparten quienes impulsan a Ritondo como gobernador.
Comentá la nota