Una propuesta del líder y precandidato a presidente del Frente Renovador, Sergio Massa, para implementar nuevamente el régimen de promoción industrial en La Rioja y Catamarca, trajo malos recuerdos a los mendocinos, lo que le valió serias críticas locales al postulante a la Casa Rosada.

“Para provincias como La Rioja o Catamarca es clave que pongamos en marcha la Promoción Industrial antes del 30 de diciembre de 2015”, dijo el diputado nacional en su visita a La Rioja, el sábado pasado, lo que le valió elogios en esa provincia y también en Catamarca. 

La propuesta massista no cayó nada bien en Mendoza, que tuvo una dura pelea por más de 30 años contra este régimen, implementado durante la última dictadura militar y que beneficiaba impositivamente a las empresas que se instalaran en las provincias vecinas de Mendoza. El sistema fue derogado por la presidenta Cristina Kirchner en el 2012. Sobre esto se expresó el ministro de Agroindustria de la provincia, Marcelo Costa, quien dijo que es una “pésima idea” la del precandidato presidencial del Frente Renovador.

“Quedó demostrado con el tiempo que la Promoción Industrial fue un negocio y no cumplió con el objetivo de desarrollar las economías regionales”, manifestó. En ese sentido, Costa insistió con el programa que presentó hace cuatro meses el gobernador Francisco Pérez, con el fin de redistribuir la mitad de los fondos de la soja para sustentar las economías regionales.

También legisladores del oficialismo y de la oposición coincidieron en que se trata de una “propuesta electoralista”, razón por la cual Massa lleva un discurso adecuado a cada lugar que visita. El año pasado, el diputado nacional presentó una serie de spots publicitarios televisivos para cada provincia atendiendo las necesidades más urgentes de cada una. Lo más curioso es que para Mendoza proponía poner el acento en la vitivinicultura y en la radicación de industrias, además de haber firmando un pacto ambiental en defensa del agua, mientras que en San Juan hacía hincapié en la minería.

Desde el PRO, el senador Gustavo Cairo, cuestionó al líder del Frente Renovador por hacer una “propuesta a la carta” a cada provincia donde viaja. “Dice lo que la gente quiere escuchar. Lo que es bueno para un lugar es malo para otros, esto sería retroceder 30 años”, expresó el legislador respecto a la Promoción Industrial.

Otro legislador que se sumó a las críticas fue el diputado Tadeo García Zalazar (UCR), quien señaló que el régimen de Promoción Industrial no es “equitativo” e insistió en el proyecto de la senadora nacional Laura Montero, de implementar un sistema de promociones diferenciadas por regiones.

Por su parte el diputado Raúl Guerra (FpV) fue más crítico con la figura de Massa. “Esto es un planteamiento electoralista y facilista”, indicó el legislador. En la misma línea se expresó el senador radical Juan Carlos Jaliff: “Es una mala noticia que uno de los candidatos a la Presidencia vuelva a hablar de una promoción sólo para dos provincias, nos cae muy mal a los mendocinos”.

También el senador Fernando Simón (FpV) criticó la propuesta massista, sin embargo consideró que los mensajes del precandidato“son parte de las reglas del juego” porque está en plena campaña electoral.

Una larga lucha

La aplicación de la Promoción Industrial entró en vigencia en 1979 y beneficiaba a San Luis, Catamarca, San Juan y La Rioja. Los beneficios y exenciones impositivas para las empresas que se radicaron en las provincias vecinas perjudicaron a seriamente a la economía local por la migración de las empresas y como consecuencia provocó una fuerte caída del empleo industrial.

Recién en el 2012 Cristina Kirchner puso fin al polémico decreto 699/10 que prorrogaba hasta el 2015 los beneficios para las cuatro provincias promocionadas y después de 33 años Mendoza y La Pampa ganaban la pulseada.

Sin respuesta

Desde el domingo, que este medio intenta que los referentes locales de Sergio Massa en Mendoza, como el intendente de San Carlos Jorge Difonso, los legisladores Daniel Cassia y Gustavo Valls, y el sindicalista de comercio Guillermo Pereyra, den explicaciones sobre las posturas de su referente. Pero los que atendieron el teléfono no quisieron opinar, y los otros directamente ni siquiera atendieron.