El kicillofismo apunta a que el acto por el Día de la Lealtad en Berisso sea una demostración de músculo político. Quienes están detrás de la organización y cuál será el punto de encuentro.
“Me han invitado y voy a venir al kilómetro cero del peronismo para demostrar que la provincia de Buenos Aires no le tiene miedo a los cipayos y vende patrias, que es una Provincia de producción y trabajo, y que el modelo que ellos plantean no nos sirve”, dijo Axel Kicillof durante la inauguración del Centro de Formación Laboral N° 406, en Ensenada, hace una semana. De inmediato se activó todo el aparato político, de logística y comunicación que rodea al Gobernador. El acto del 17 de octubre en Berisso va muchísimo más allá de la pelea ideológica con Javier Milei.
La apuesta tiene una enorme connotación interna, en uno de los momentos de mayor tensión en la disputa entre el cristinismo (incluida Cristina Fernández) y el Gobernador. La idea es que el encabezado por el mandatario provincial sea el acto central del Día de la Lealtad, y se constituya en un mojón para la reconstrucción de un espacio que aún está herido por la derrota del año pasado. Debe ser, para Kicillof, una manifestación contundente de músculo político.
La cita será en el monolito que simboliza el kilómetro 0 del peronismo, en la calle Nueva York, desde la que partieron los obreros de los frigoríficos el 17 de octubre de 1945 para cambiar, definitivamente, la historia política del país. El lugar no cuenta con la amplitud que requeriría un acto multitudinario al que cada dirigente se ve obligado a aportar militantes para desbordar la escena; y si bien todos movilizarán la foto que realmente importará ese día es quiénes acompañarán al mandatario. Mostrar músculo político es el mejor premio que puede otorgar coronar de fichas al 17.
Como publicó La Tecla ayer en su edición impresa, la disputa interna entre Kicillof y La Cámpora tiene, entre otras cosas, la espada de Damocles sobre varios funcionarios bonaerenses que responden políticamente a la Orga pero gestionan bajo el mando del Gobernador, quien ya estaba entibiando con la ausencia de ellos en Mar Chiquita y terminó de calentarse cuando participaron del encuentro organizado por Máximo Kirchner en La Plata, donde se entonó una canción agresiva hacia el mandatario.
¿Será el 17 de octubre, en Berisso, donde quede definida la suerte de alguno? Por lo pronto, hay quienes han escuchado por parte de Kicillof una advertencia de que tomará cartas en el asunto, y el primer paso sería reunirse individualmente con ellos a su regreso de México, donde asistió a la asunción de la presidenta Claudia Sheinbaum después de mantener una reunión con el presidente de Brasil.
El operativo “kilómetro 0” ya está en marcha y son muchos los que trabajan en él. Por el lado del Gobierno, la organización política la tienen Carlos Bianco y Andrés Larroque; por el lado de los intendentes se hacen cargo en este caso el local, Fabián Cagliardi, el ensenadense Mario Secco y el jefe comunal de La Plata, Julio Alak. También Jorge Ferraresi (Avellaneda) tiene a cargo parte de la movilización, mientras que la presencia gremial es coordinada por el ministro de Trabajo, Walter Correa.
Celosos de los actos encabezados por el Gobernador, en su equipo no suelen dejar nada librado al azar y prefieren ser ellos antes que actores externos (incluso los propios jefes comunales) los que armen la puesta en escena. Por eso, cada vez que hay un evento con la participación de Kicillof hay un equipo de avanzada perteneciente a las áreas de prensa y de ceremonial. En el dispositivo que conduce la ministra Jésica Rey precisamente dos berissenses son los encargados de hacer las primeras visitas y dar las primeras directrices organizativas. Se trata de Jésica Milillo y Gabriel D'Elía.
Todos han comenzado a trabajar en el tema y acelerarán la semana que viene para que el jueves 17 nada falle y Kicillof ponga otro mojón en la localidad ribereña. Hay entornistas que fantasean con otro kilómetro 0, refundacional y superador de una etapa que no pocos ven agotada pese a que muchos otros están convencidos que nada ni nadie puede hoy correr de la escena central a Cristina Fernández. La expresidenta también se muestra en modo campaña y entusiasma a sus fans.
En la batalla de los actos, quien se quede con la centralidad del 17 de octubre habrá logrado una pequeña victoria, nimia o pírrica, pero victoria al fin. Por ahora La Cámpora no ha confirmado de qué manera festejará el Día de la Lealtad. Sí avanza, con mucha rosca previa, en el encuentro que el PJ bonaerense, conducido por Máximo Kirchner, realizará el próximo viernes y sábado en Monte Hermoso.
Por su parte, del lado de Kicillof, el ministro de Infraestructura y Servicios Públicos, Gabriel Katopodis, avanza con la organización de nuevos plenarios en distintos puntos de la Provincia, como el organizado en Santa Clara del Mar (Mar Chiquita). Uno de ellos se realizaría en Ituzaingó y el otro en San Pedro entre la segunda quincena de este mes y los primeros días de noviembre.
Comentá la nota