Remi tiene 3 años y hace un año y dos meses fue diagnosticado con Trastorno del Espectro Autista. Si bien su familia presentó la documentación para que la obra social pueda dar la cobertura que por ley debe tener, la misma no es autorizada, de manera que lanzaron una petición a través de Change.org para tener una respuesta.
Hace un año y dos meses Remi de 3 años fue diagnosticado con Trastorno del Espectro Autista (TEA) y desde aquel momento en poco tiempo lograron que obtuviera el carnet de discapacidad, comenzando los trámites en la obra social Sancor Salud para que pudiera acceder a la prestación que por ley le corresponde. Sin embargo, todo se transformó en una odisea para sus padres.
Al concurrir la primera vez contaron que les entregaron un manual de formularios para completar, alrededor de cuarenta hojas, con indicaciones para que completara la fonoaudióloga, terapista ocupacional, pediatra, neurólogo y padres, entre otros. Una vez completada toda la información se llevó nuevamente a la sucursal local de la obra social para que se les informara si faltaban papeles, pero la respuesta fue “no estamos para eso”.
“Me dijeron que me fije yo si estaba listo y lo entregue, cuando solamente pedía ayuda porque estaba perdida entre tantos papeles. Escribí a la central para comentar lo ocurrido y una asesora desde Neuquén me ayudó para que entregara todo” señaló a Crónica la mamá del niño, Magalí Casamayú, y agregó: “la asesora no me responde y cuando lo hace me dice que mande de nuevo la documentación porque no la encontraba, la perdieron y me terminan escribiendo desde el sector de discapacidad diciendo que debía cambiar las fechas de todos los formularios. El 31 de diciembre hago otra presentación, no faltaba nada y me volvieron a pedir documentos que ya había presentado, y todos los meses vuelven a pedir lo mismo” dijo la mujer.
Así, tanto la fonoaudióloga como la terapista ocupacional volvieron a reenviar documentación a la obra social expresando su enojo por la situación, pero la madre de Remi no tuvo respuesta alguna y cuando se comunica indican nuevamente que falta documentación, incluso se encontró con formularios solicitados que no figuraban en el manual, según dijo.
“Son estrategias para demorar todo, me niegan hasta la cobertura de pañales cuando le corresponde y dicen que no. Hicimos las denuncias en Superintendencia de Salud y en Defensa del Consumidor pero aún nadie acciona” cuestionó.
De esta forma, decidió iniciar una campaña en Change.org para dar visibilidad a su reclamo y exigir a la obra social que cumpla con los derechos de su hijo, donde ya se logran más de 426 firmas. De este modo, esperan que pronto su reclamo pueda llegar a buen puerto, primero porque se trata de la salud de su hijo, y segundo porque los costos de cada una de las terapias y necesidades del niño están siendo cubiertas en su totalidad por sus padres, cuestión que no debería ocurrir y que sigue sucediendo en muchos casos.
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