En ese marco, confió que el Municipio no lo hizo partícipe de su propuesta para construir el edificio que albergará al Polo Informático (“una cuestión inmobiliaria”) y coincidió con otros sectores de la comunidad que sostuvieron que la casa de altos estudios está desaprovechada en Tandil.

“No tengo ninguna duda”, afirmó Tassara sobre la teoría que esgrime que el Gobierno municipal no explota al máximo la presencia de la Unicén en proyectos como el Centro de Monitoreo o el desarrollo del boleto electrónico y el estacionamiento medido.

El rector analizó que “seguramente podría mejorar” el vínculo con el Municipio y aclaró que “nuestra disposición es total. De hecho, las cosas que llegan, que se generan, nunca han tenido cortapisas. Estamos colaborando con la policía (de Prevención Local), que fue un tema que el consejo superior miró atentamente y sin embargo, nos pareció que teníamos que dar una mano en eso y la estamos dando”.

En una extensa charla con este Diario, agregó que “para demostrar esto que digo basta con pensar en el Polo Informático. Se hizo todo sin hablar con nosotros. Lo que supuestamente se va a hacer, que ni siquiera tengo precisiones de qué es. Hay una manzana, se convocó a un proyecto edilicio, una cuestión inmobiliaria que está bien, no hay nada que decir; pero fuera de lo que está haciendo la Universidad y las empresas en conjunto”.

Evaluó que “creo que hay un desaprovechamiento. No es que nosotros no estemos dispuestos a colaborar. Como ciudadano tandilense, fuera quien fuera el rector, me parece que la Universidad tiene un bagaje, que mira para la ciudad, un conjunto de acciones, de beneficios que se podrían seguramente multiplicar, agregarle valor a lo que hace la Universidad o a lo que hace el Municipio en muchos casos”.

Como otro ejemplo, citó que “se habla de una ‘ciudad del conocimiento’. Está bien, el conocimiento está porque la Universidad lo hace y lo vamos a seguir haciendo”. En este sentido, argumentó que no se sienten incluidos en estas propuestas, ya que “de hecho hubo reuniones fuera del país donde se fue con ese sentido y la Universidad no estuvo invitada. Nosotros seguimos haciendo lo nuestro. La verdad, lo lamento como ciudadano tandilense, como rector seguimos haciendo lo nuestro. Si nos demandan, hacemos lo que hay que hacer”.

De todos modos, Tassara aclaró que “quien tiene depositada la soberanía popular es el Intendente. Nosotros tenemos la acotada soberanía universitaria. La Universidad podría ser útil. Tampoco es que nosotros queramos marcar ningún campo político”.

Un tironeo “sin sentido”

En más de una oportunidad, el Municipio y la Unicén han demostrado cierta puja por la iniciativa en torno a la industria del software. “Es una disputa absolutamente sin sentido porque no existe Polo sin Universidad y empresas; pero sí existe Polo, como de hecho existió, sin Municipio, sin Estado provincial y sin Estado nacional, lo que no es bueno. Pero sin el conocimiento y sin las empresas no hay Polo”, dictaminó el contador.

Por otra parte, marcó que “las cosas que el Municipio empezó a hacer son muy posteriores a que el Polo avanzara y se creara la Cepit (Cámara de Empresas del Polo Informático de Tandil), que además fue impulso de la Universidad. Está claro que eso puede existir. Ahora, sin Universidad y sin empresas no existe, porque las empresas se nutren de la Universidad”.

El Ministerio de Industria de la Nación y la CIC apoyarían otro proyecto para el software

Hace dos años, la Unicén comenzó a pensar en una segunda etapa del Polo Informático, que ya suma más de diez años en funcionamiento, un gran crecimiento y unos 1.500 puestos de trabajo -la mayoría de alta calificación-. Además, se apoya en la Facultad de Ciencias Exactas, con las carreras de Ingeniería en Sistemas y la Tecnicatura en Software, una herramienta que demandaba la industria.

“Observábamos que una buena cantidad de empresas básicamente generan horas hombres, venden horas de desarrollo de software para otra empresa que hace un producto o para otra que hace una parte de un producto que finalmente vende otra. Hay toda una cadena que si bien se agrega valor en el Polo Informático, se podría generar más valor si hubiera desarrollo de productos, que sólo algunas empresas lo hacen”, explicó el rector Roberto Tassara.

Desde esta perspectiva, le presentó el proyecto al gobernador Daniel Scioli en una reunión que mantuvo junto a Pablo Bossio. “Uno de los caminos es realizar start up (compañías emergentes) que se desarrollan entre egresados de una unidad académica, en este caso serían los de Ingeniería en Sistemas de Exactas, y empresas o juntarse entre ellos para generar emprendimientos que terminan siendo exitosos. Pero a su vez, las empresas trabajando con los grupos de investigación. Eso genera un círculo virtuoso de creatividad, innovación y de desarrollo de productos”.

La iniciativa, que se está gestionando ante el Ministerio de Industria de la Nación, busca construir un edificio que pueda albergar espacios para que las empresas del Polo trabajen junto con los institutos de investigación de la Unicén con el objetivo de desplegar creatividad e innovación.

Nuevos negocios

Hoy la Unicén tiene tres institutos, Isistan (Instituto Superior de Ingeniería de Software, Pladema e Intia (Instituto de Investigación en Tecnología Informática Avanzada), donde se están desarrollando importantes proyectos que superan los 10 millones de pesos y están vinculados a simuladores, el programa para Anses Fácil y otros destinados a Subtes de Buenos Aires, entre otras iniciativas.

Con este capital más los recursos humanos que prepara Exactas y las empresas, la intención es generar un espacio abierto donde se puedan desarrollar nuevas firmas, productos o recibir demandas para luego avanzar con la constitución de nuevos emprendimientos.

Allí, con la mediación de la Universidad, podrán recibir capitales de privados -personas que invierten en ideas que otros desarrollan- o del Estado -con programas como Capital Semilla-. “Hay una variedad de alternativas de negocios, sean financieros, económicos, societarios, de alianzas, etc., y también con todas las empresas que están en el Polo”, explicó el rector.

En ese camino, solicitaron apoyo al Gobierno nacional para construir un edificio en el Campus que albergue espacios con boxes y salas más grandes, destinados a que las empresas del Polo y los institutos de investigación trabajen en forma conjunta.

“El núcleo del desarrollo de esta propuesta es que se junten los que están pensando en términos empresarios, los que saben del tema, los que investigan, los que quieren llevar a cabo pero necesitan trabajar con alguien. Ese es el espacio que estamos pensando, trabajando con Industria”, precisó Tassara.

Hace algunas semanas, le presentó la propuesta a Daniel Scioli, porque “su equipo ha desarrollado fuertemente los parques industriales, pero también viene diciendo el Gobernador en sus presentaciones como candidato a presidente, la necesidad de invertir en ciencia y tecnología para agregar valor. Entonces estaríamos conveniando con la Provincia, a través de la Comisión de Investigaciones Científicas (CIC), para trabajar juntos. Ellos aportarían la posibilidad de becarios, investigadores, capacitaciones, todo lo que va a formar parte del proyecto”.

Siempre interesado en la tecnología, Daniel Scioli conoció los institutos de la Unicén durante una visita a la biblioteca central del Campus. “Había estado cuando se fundó el Polo por parte de la Universidad, más o menos lo ha seguido. A fines del año pasado estuvo de visita con Diego Bossio y conoció los simuladores en el Pladema. Estaba en tema y el objetivo conceptual va en línea con lo que está predicando, entonces rápidamente acordó que avanzáramos con el Ministerio de la Producción y la CIC”, contó el contador.

Con esta propuesta en la mira, el Gobernador podría visitar la Unicén en vacaciones de invierno, cuando venga en plena campaña electoral con miras a alcanzar la presidencia. Incluso, si lograran avanzar en el trabajo previo, firmarían el convenio con la CIC.

Tassara le explicó a Scioli que se trata de un proyecto diferente del que impulsaron el Municipio y la Cámara del Software que busca construir un inmueble para la radicación de empresas.

Incluso, durante la reunión recordaron que la Unicén y las empresas conformaron el Polo, y luego los tres niveles del Estado se sumaron para apoyar el desarrollo y el agregado de valor.

Referencia nacional y contratos millonarios

El software es uno de los sectores que más ha crecido en la Universidad, junto a las áreas vinculadas a la producción agropecuaria y alimentos tanto en Veterinarias como en Agronomía, e Ingeniería en la relación con YPF que ha desarrollado un prototipo para la exploración submarina de petróleo.

Además, el Instituto Hidrológico de Llanuras (Ihlla) está trabajando en la cuenca Matanza Riachuelo y también va a participar en el estudio de las inundaciones en la provincia a través de la firma de un acuerdo entre la Facultad de Agronomía y el Ministerio de Asuntos Agrarios que conduce el tandilense Alejandro “Topo” Rodríguez.

“La dinámica hace que en Sistemas estén permanentemente apareciendo y demandando cosas nuevas, y la Universidad, de alguna manera además de tener unidad ejecutora de doble dependencia con el Conicet que es de más alto valor científico, tiene institutos que desarrollando software en el tema simuladores se han vuelto una referencia nacional. Estamos desarrollando simuladores para el Ministerio de Trabajo, para Subterráneos de Buenos Aires con un contrato por varios millones de pesos, para otras universidades para carreras de medicina para no requerir siempre la presencia de un cadáver. Es una especialización importante”.

Todos los proyectos están estrechamente vinculados a las demandas de la sociedad y la Unicén empezó antes de 2003 cuando se dio la recomposición productiva. “Estando Néstor Kirchner y sobre todo Cristina, nos pidió a las universidades la necesidad de involucrarnos con crear valor en origen fuertemente. Lo ha repetido, lo ha apoyado; lo recibimos, lo percibimos y lo hacemos. Nuestra Universidad además lo había empezado a hacer con otras condiciones macroeconómicas, ya por el año 2000 habíamos intentando abrirnos a la sociedad”.

De esos contratos millonarios quedan recursos en la Unicén, porque generan fuentes de trabajo y salarios, capacitación en la tarea, equipamiento hasta construcciones que pasan al patrimonio de la casa de altos estudios, y prestigio. “A veces, depende del tipo de tarea, queda un margen para la Universidad que se utiliza una parte para quien realizó la tarea y una parte más chica para financiar otros gastos generales”, dijo Tassara.

“Siempre pensé que Scioli era el hombre para la continuidad”

Ya en la arena política, Roberto Tassara expresó que la fórmula presidencial del FPV “me parece bien. Siempre pensé que Scioli era el hombre para la continuidad de esto, porque creo lo que dice, pero además lo he percibido. En las distintas cuestiones que hemos tenido que tratar por la Universidad, en diversos lugares en donde hemos interactuado como Necochea, Azul, Las Flores, siempre lo vi cumpliendo con lo que se comprometía a hacer”.

Agregó que “hablamos mano a mano este tema de agregar valor, la necesidad de seguir impulsando estas políticas y demás”. Pero también consignó que “hubo un almuerzo de todos los rectores de universidades públicas con él, donde dijo que va a firmar el compromiso de apoyar todos los puntos del documento que se le entregó del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), donde le pedimos a los candidatos de todos los partidos que sigan con estas políticas”.

Se dijo convencido de que Scioli es la continuidad del proyecto oficialista y aceptó que puede haber matices. “Creo ser continuador de las ideas de Néstor Auza pero soy distinto. Cada uno trabaja de determinada manera”, marcó a modo de ejemplo.

“Conceptualmente tengo plena confianza en Daniel y me parece que Carlos Zannini es un hombre fundamental para el armado de las decisiones que se tomen, además de colaborar en tomarlas. Es un experto en sacar leyes, decretos, en organizar las decisiones de manera que no puedan ser después volteadas o saboteadas fácilmente. Me parece que es una buena dupla”, manifestó.

Los pedidos de las universidades

Lo que  pidieron los rectores es que se cumpla la ley que asegura el 6 por ciento del PBI destinado a educación; el programa de infraestructura universitaria que a Tandil trajo la biblioteca central y el primer módulo de las residencias estudiantiles, y la Facultad de Derecho de Azul; programas de mejoramiento de la calidad de las carreras que benefició a distintas facultades; Conectar Igualdad; la recuperación de la educación técnica; los programas de apoyo económico a los estudiantes, de los cuales el último es el Progresar; la política de ciencia y técnica e innovación; entre otros puntos.

Este petitorio lo firmaron todos los rectores de universidades públicas, independientemente de su signo político partidario. “La política universitaria ha sido absolutamente exitosa”, resumió Tassara sobre los gobiernos kirchneristas.