Las máquinas lectoras a veces no reconocen los plásticos en el primer contacto, por lo que la misma persona paga dos veces el mismo viaje. En caso de que quieran revenderlo, el chofer se lo prohibe.
Los pasajeros de las líneas de transporte, pertenecientes a Ersa SA, manifiestan quejas constantemente sobre las complicaciones que tiene el plástico, ya que "surge la avivada de que al no salir la impresión del boleto cuando lo acercan a la lectora, el chofer insiste en otro intento, por lo que salen impresos dos boletos", explicó a EL LIBERTADOR el presidente de la Asociación de Usuarios y Consumidores (AUC), Nelson Veas Oyarzo.
Si bien el caso en cada usuario no ocurre todos los días, algunos aseguraron que les ocurrió más de una vez en el mes, lo que trae aparejado una ganancia colateral para la empresa, ya que una persona está pagando por dos.
La responsabilidad recae sobre el chofer "que no se hace cargo ni responde", agregó el Defensor de los consumidores, porque es él quien insiste a los usuarios que acerquen la tarjeta nuevamente a la lectora, cuando muchas veces lo que realmente sucede es que el proceso de la máquina se da en forma lenta.
"En la Defensoría tenemos cerca de seis o siete quejas por teléfono sobre este ejemplo, pero en las calles la gente que me lo comenta es mucho más", aseguró Oyarzo.
Al contrario del incremento anterior, que diferenciaba los montos si se pagaba de una u otro forma (dos pesos con monedas, 1,90 con tarjeta), el aumento actual sólo trajo complicaciones para los usuarios en diversos aspectos.
PÉRDIDA DE
LOS USUARIOS
Al subir a cada unidad, los pasajeros que deben pagar el boleto con tarjeta tienen que acercarla a la lectora, que si no la reconoce en la primera pasada, tienen que hacerlo de nuevo, lo que en varias oportunidades da como resultado dos boletos para la misma persona. Para recuperar ese monto extra, varias veces los usuarios intentan "vender" el boleto a quien va a pagar con monedas.
En ediciones anteriores de EL LIBERTADOR, los pasajeros manifestaron que deberían ajustar gastos para afrontar el incremento del boleto, por lo que el pago extra generado en un solo viaje complica aún más su realidad financiera.
La situación descripta trae como resultado que para recuperar el dinero, los usuarios deciden vender el boleto de más a otro usuario, lo que no es fácil, ya que si el chofer lo descubre, lo prohibe.
Lo que no está permitido es cobrarle dos veces a la misma persona, tal como lo contempla una medida autosatisfactiva presentada desde la AUC según su Presidente, pero los choferes que responden a la empresa hacen caso omiso de ella agravando la situación al no permitir que el usuario recupere su dinero al revender el boleto que ya fue abonado.
El incremento del pasaje, la falta de vuelto y los pagos dobles del boleto (y en más de una oportunidad, se abonan hasta cinco) son destinados a la empresa, que aumenta sus ingresos a través de las irregularidades de las máquinas expendedoras reconocidas por los usuarios.
Desde la AUC, su Presidente pretende beneficiar a los usuarios, pero insiste en que se acerquen con datos concretos a la sede.
Reclamos formales
Nelson Veas Oyarzo, desde la asociación que preside, pretende reunir los casos de los consumidores para presentarlos a la Municipalidad, fundamentalmente aquellos afectados por la falta de vuelto de las máquinas expendedoras. El problema, según él, radica en que "tenemos cuatro casos con documentación, en tanto que llamados son más de 30, por lo que es necesario que se acerquen con el boleto y expongan su ejemplo para tener fundamentación en las quejas".
Oyarzo resaltó que "la gente que se queja es mucha, pero en la asociación se trabaja con el respaldo de la documentación, por lo que solicito que se acerquen así se recolectan más casos".
También reconoció que la "participación cuesta un poquito, pero es la forma de conseguir algo".
La Municipalidad, tras la denuncia de los consumidores publicada por EL LIBERTADOR sobre la falta de vuelto, llevó a cabo controles en las unidades de colectivos para regularizar la situación, pero hasta el momento siguen habiendo quejas, ahora sobre la falta de los cinco centavos para los que pagan 2, 75 el boleto, que si bien no implica una pérdida excesiva en los bolsillo, la suma es significativa para la empresa.
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