“Hablar de memoria, verdad y justicia no es venganza. Me gustaría que ese concepto quede bien claro”. Así se despacha Susana Salerno en comunicación con “el Retrato…”,quien prestó declaración en el Juicio contra la CNU en Mar del Plata y es una de las impulsoras de sentar en el banquillo de los acusados a los integrantes de la Concentración Nacional Universitaria.

Después del editorial del Diario La Nación, que habla del “vergonzoso padecimiento de condenados, procesados e incluso de sospechosos de la comisión de delitos cometidos durante los años de la represión subversiva y que se hallan en cárceles a pesar de su ancianidad”, Salerno repudió el escrito y apuntó contra los “intereses” del medio capitalino.

“Hemos tardado casi 40 años en tratar de llevar adelante los Juicios por Delitos de Lesa Humanidad… Tuvimos que esperar durante todo el Terrorismo de Estado, después las idas y venidas del gobierno del expresidente Raúl Alfonsín, la decepción del gobierno de Carlos Menem, para recién conseguir en 2003 lo que tanto pedíamos, que las leyes de Obediencia Debida y Punto Final sean declaradas nulas para poder llevar adelante estos juicios”, declaró.

Renglón seguido, Salerno hizo foco en “el interés del Diario La Nación tiene que ver con las políticas que llevó adelante toda su vida, como también de los grandes empresarios que les han dicho que sí a los Golpes de Estado que han ocurrido en nuestro país” y avisó: “Esperamos que quienes asuman el 10 de diciembre tengan en claro que Memoria, Verdad y Justicia es una política de estado. Esperamos que sigan adelante todos los juicios contra quienes estén acusados por las aberraciones que sucedieron durante el Terrorismo de Estado”.

-¿Temen que después del editorial del Diario La Nación puedan aparecer réplicas similares en distintos medios?

-Por supuesto, no nos cabe la menor duda. Creemos que el Diario ha sido el vocero de ese pensamiento, como lo fue en su momento (Claudio) Escribano, que en 2003 le dijo al presidente electo, Néstor Kirchner, qué era lo que tenía que hacer. Lo única que falta es que en cualquier momento salga a hablar Cecilia Pando o cualquier otro retrógrado que aún no reconozca que todavía quedan más de 200 nietos por recuperar. Las madres y Abuelas de Plaza de Mayo están viejitas, muchas otras ya no están, pero toda una generación continuará en busca de Memoria, Verdad y Justicia.

-¿Le cree a Macri cuando afirma que continuará con los juicios contra genocidas?

-Dudamos. Fundamentalmente porque puede llegar a influir sobre lo que nosotros llamamos la corporación judicial.