La iniciativa surge del oficialismo y no reemplazará a la actual denominación, sino que se sumará para ordenar el ejido urbano junto a los nombres actuales. Serían exceptuadas de la norma los pasajes, el Barrio Obrero, Los Aromos y el FO.NA.VI.

El concejal vecinalista Jorge Damiani afirmó que "serán dos sistemas que van a convivir: el que está y el que con el tiempo se le agregará numeralmente para facilitar el movimiento dentro de la ciudad".

Sobre la aplicación, indicó que "será sin costo extra, debido a que a la concesión de la cartelería se le dejó aclarado que debía dejar espacio para estampar el número de las calles".

Izurieta avaló el proyecto

En tanto, el arquitecto municipal Mario Izurieta comentó la posibilidad y la avaló por el crecimiento que presenta la ciudad.

"En Catastro se agregará como un elemento adicional al nombre que tiene. Después, irá en el uso de la población de cuál va a tener más peso", explicó consultado sobre las particularidades.