La gobernadora encara el tramo final de la carrera de fondo, que tiene la línea de llegada el próximo domingo. En Vicente López se prepara un acto de "estética peronista". Orientación en las redes para simpatizantes. La fiscalización, un tema que preocupa.
Sin tiempo para lamentos ni desencuentros, Juntos por el Cambio entra en la recta final rumbo a las generales del próximo 27 de octubre, donde la definición será a todo o nada. Lo saben y en eso centran algunos de los discursos de última hora: no hay balotaje, se gana o se pierde por un voto.
Decidida a dar batalla para remontar la paliza que el Frente de Todos le propinó en las PASO, Vidal apura el paso y este martes hará triplete. Primero estará en Tigre, acompañando a su candidato a intendente, Segundo Cernadas, en un territorio en el que el intendente peronista Julio Zamora sacó más del 50% de los votos y 20 al postulante macrista.
Seguirá en Luján, territorio del "amarillo" Oscar Luciani, donde las listas del Frente de Todos superaron al oficialismo, un motivo más que suficiente para que la gobernadora le rece hoy a la Virgen. Y cerrará en Lanús, donde Néstor Grindetti, otro ultramacrista, lucha por retener el control del distrito del Conurbano, donde el Frente de Todos sacó una luz de ventaja en las primarias.
En la carrera de fondo, el oficialismo provincial apuesta fuerte a un gran acto en Platense, este jueves, en un territorio favorable. Allí, el primo del presidente -Jorge Macri- será anfitrión de uno de los últimos intentos por revertir la situación, para lo cual se diseñó un acto de "estética peronista", en un estadio, con mucha gente (piensan juntar unas 25.000 personas) y color de multitudes.
Los organizadores mantienen bajo siete llaves los detalles del encuentro en Vicente López, aunque sí trascendió que hubo un relevamiento en las redes para definir la banda de sonido que acompañará la puesta en escena del jueves. Allí, los seguidores de Juntos por el Cambio se inclinaron, mayoritariamente, por las versiones adaptadas de dos temas musicales, uno de Gilda y el otro de Abel Pintos. Por eso serán los que más sonarán, con seguridad.
Por estas horas, cientos de militantes cambiemitas se esfuerzan por facilitar la llegada de los suyos al evento, para lo cual inundan con carteles las redes sociales con la convocatoria. Una de las más llamativas es la que explica con detenimiento la manera de llegar con transporte público al estadio del "Calamar", con el rótulo de "A Platense con la SUBE", que replican una y otra vez.
Aunque, antes de subirse al escenario del estadio ubicado junto a la General Paz, límite entre la provincia y la capital (se espera un buen aporte de adeptos porteños), Vidal estará en Mar del Plata, distrito de los grandes en el que busca cosechar votos, y donde a pocas horas de su presencia hará lo mismo el Frente de Todos.
Mientras estos detalles se van puliendo, la preocupación por una firme fiscalización el día del comicio ha hecho que se pongan en marcha cursos acelerados para los voluntarios, que se repiten a lo largo de la geografía bonaerense. Aunque no es un tema que obsesiona, sí preocupa, es por eso que las cifras de fiscales y colaboradores para el domingo 27 se duplicarán. "En las PASO tuvimos unas 50.000 personas trabajando, entre fiscales y gente de apoyo. En esta ocasión serán casi 100 mil los que cuidarán que no haya ni un voto dudoso", señaló a La Tecla.info uno de los responsables de operativo en la provincia.
En cuanto a lo sucedido el pasado 11 de agosto, la fuente reconoció que "no perdimos por los fiscales, porque en la provincia no hubo tanto descontrol como en otros puntos del país, sino porque la gente no nos votó", explicando que el momento que requiere más atención es al final del comicio, cuando los datos son volcados a las planillas.
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