La principal obra de infraestructura que la provincia de Chaco se apresta a iniciar con la ayuda financiera de la Nación quedó rodeada de fuertes sospechas.
Inicialmente la obra fue preadjudicada al consorcio integrado por las empresas Isolux y Esuco que presentó una oferta por $ 1.522 millones. Pero, tras diversas “sugerencias” que habría recibido del ministerio de Planificación, la administración chaqueña de Jorge Capitanich modificó su parecer y procedió a adjudicar la obra al grupo de las firmas locales Supercemento y Rovella Carranza y la brasileña OAS cuya oferta fue $ 110 millones más elevada.
Si bien no aparece integrando entre las nuevas ganadoras, distintas fuentes del ámbito de la construcción coincidieron en señalar que una de los principales beneficiarias de la obra sería la firma CPC del empresario kirchnerista Cristóbal López. Esta constructora habría acordado con el grupo que se quedó con el proyecto ejecutar cerca del 30% de los trabajos en calidad de subcontratista.
Además de tomar por sorpresa a los especialistas y a los empresarios del sector, el brusco cambio registrado en el proceso licitatorio del acueducto chaqueño comenzó a ser seguido de cerca en el Congreso Nacional.
Por medio de un pedido de informes, el diputado Juan Carlos Morán (Coalición Cívica-Buenos Aires) le reclamó a la cartera de Planificación que explique los motivos por los cuales avaló la selección de la oferta más cara .
Tras destacar que tiene una directa participación a través del financiamiento que aporta el ENHOSA (Ente Nacional de Obras Hídricas De Saneamiento), Morán le pidió a De Vido que informe si estaba al tanto de la participación de CPC como futuro subcontratista de la obra.
“De confirmarse esta situación-–destacó el legislador de la CC– estaríamos ante otra contratación pública cargada de sospechas e irregularidades”.
Con el aporte de recursos nacionales, la obra del “Segundo Acueducto” fue licitada por la empresa estatal chaqueña Sameep (Servicio de Agua y Mantenimiento) a mediados de este año.
A la instancia final llegaron cuatro grupos: Isolux-Esuco ($ 1.522 millones); Supercemento-Rovella Carranza-OAS ($ 1.633 millones); Odebrecht-Cartellone ($ 1.762 millones) y Techint ($ 1.903 millones).
Pese a los cuestionamientos recibidos, las autoridades chaqueñas y nacionales tienen previsto arrancar con las obras del acueducto de 510 kilómetros en diciembre . El plazo de construcción será de 36 meses y cuando entre en servicio beneficiará a una población de 500.000 habitantes.
Otro dato llamativo de la licitación lo dio el banco estatal brasileño BNDS, que apareció aportando financiamiento privado para los cuatro grupos que compitieron por el proyecto.
Comentá la nota