Por Jaime Rosemberg

Era casi la medianoche del viernes y el flamante ministro de Desarrollo Productivo, Daniel Scioli, compartía una suerte de vip con su par de Obras Públicas, Gabriel Katopodis, y distintos sindicalistas.

Los organizadores de la tradicional fiesta del Sindicato Único de Trabajadores de Peajes y Afines (Sutpa), que celebró su 16° aniversario, no habían reparado en gastos. En ese mar de 3000 invitados, Facundo Moyano, que oficiaba de anfitrión, miraba de reojo la puerta de entrada del Pabellón 2 de Costa Salguero. El joven gremialista esperaba ansioso al titular de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, su otro invitado estelar de la noche. “Ya junté alguna vez para una foto a mi hermano Pablo con Susana Giménez. ¿Por qué no podría juntar ahora a Massa con Scioli?”, desafiaba a sus interlocutores Facundo, quien el año pasado renunció a su banca de diputado nacional planteando diferencias con el kirchnerismo.

A pesar de su optimismo, las esperanzas de Moyano hijo se fueron diluyendo con el correr de las horas. Acaso tanteando terreno hostil, Massa finalmente nunca llegó, Katopodis se retiró antes de los discursos y “el Pichichi” se ganó algunos aplausos de los militantes del sindicato de peajes. Feliz y en su salsa, el flamante ministro de Desarrollo Productivo se sacó fotos con todos los que se lo pidieron y hasta tiró unos pasos de baile cuando subió al escenario L-Gante, el cantante del momento.

“Sergio se fue todo el fin de semana con la familia, al interior. No sé si lo invitaron a la fiesta”, indicaron cerca de Massa.

“Dejé mi cargo en el Poder Legislativo de la Nación, banca que conseguí por ustedes y la Juventud Sindical, no porque le escape al debate político, sino porque no sentí que las opciones para mí condujeran a un destino mejor para nuestro ideal de país”, dijo Moyano a la hora de los discursos, dejando en claro que sus diferencias con el kirchnerismo subsisten, más allá de su buena sintonía con distintos miembros del oficialismo.

Además, y como para alejar el fantasma del machismo que ronda a las organizaciones sindicales, Moyano festejó junto a los suyos la conformación de la nueva comisión directiva que es integrada “en su mayoría por mujeres”, con Florencia Cañabate como secretaria general y el propio Facundo Moyano como flamante secretario general adjunto.

Sujarchuk, de licencia pero con oficina en “su” Escobar

El intendente kirchnerista de Escobar, Ariel Sujarchuk, fue uno de los tantos jefes comunales que el año pasado pidió licencia para ocupar un cargo nacional, en su caso la titularidad del Ente de control de la Hidrovía.

Precavido, el intendente hizo votar a fin del año pasado una resolución del concejo deliberante local, que por unanimidad le cedió un espacio de uso sin cargo en la misma intendencia, para poder tener reuniones vinculadas a su nuevo rol (la sede central del Ente está aún en refacciones, en la ciudad de Rosario) y también recibir “a cualquier vecino que se quiera juntar con él”, según explicaron cerca del jefe comunal.

A pesar de haber conseguido oficinas provisorias en el Museo Nacional Ferroviario de Retiro, el mismo que utilizaba María Eugenia Vidal en sus tiempos de gobernadora bonaerense, Sujarchuk sigue yendo a la intendencia de Escobar –según cuentan cerca suyo– para tener “reuniones con su equipo”, porque “es intendente con licencia, pero sigue siendo intendente”. De buen vínculo con Cristina Kirchner, Sujarchuk no descarta ser candidato a gobernador en 2023.

Morales, en Canadá y con “centros” a Alicia Kirchner

Con las bajas de última hora del renunciado Matías Kulfas y del ministro de Economía, Martín Guzmán, una importante delegación de gobernadores y funcionarios estuvo hasta principios de esta semana en Toronto, Canadá, donde se llevó a cabo una importante conferencia sobre minería.

Único radical entre peronistas, el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, sostuvo largas charlas con mandatarios del PJ, y dicen algunos testigos que la gobernadora de Santa Cruz, Alicia Kirchner, que también tiene intereses en el desarrollo minero, fue una de las protagonistas de esas conversaciones. “Se paró como presidenciable, y habló de trabajar en conjunto con otros gobernadores”, contó uno de los participantes de la delegación, donde también estuvieron Raúl Jalil (Catamarca) y Sergio Uñac (San Juan). “El día que dejemos de trabajar sólo para los años en los que estamos gobernando, nos va a ir mejor”, dijo Morales, que también habló del desarrollo minero en la Patagonia, una centro a la gobernadora de Santa Cruz que no pasó desapercibido.

Hace dos semanas, la Legislatura porteña vivió una acalorada discusión entre el diputado Roberto García Moritán, conocido por ser el marido de la modelo y conductora Carolina “Pampita” Ardohain, y la bancada kirchnerista, con el proyecto de ley de integración productiva e impulso al trabajo en los barrios populares.

“Estoy orgulloso de ser el marido de Pampita, una mujer libre y emprendedora”, dijo el diputado, respondiendo a la crítica a los “pampitos de la vida” de la kirchnerista Berenice Iañez.

Pues bien: la propia modelo salió a defender a su marido. “Se interiorizó en la política con el fin de ayudar y de hacer cosas importantes. Cuando me dijo que se iba a abocar más a esto –a pesar de que lo venía haciendo hace muchos años y sin conocerme– contó con todo mi apoyo”, dijo.

Activo y voz de la agrupación de Ricardo López Murphy en la Legislatura porteña, García Moritán sostiene algunos vasos comunicantes con el bloque que responde a Javier Milei, mientras critica fuertemente el sistema de planes sociales y las protestas piqueteras.

Una curiosa foto de dos embajadores en México

Luego de batir récords por su permanencia en el Ministerio de Trabajo durante los tres gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner, Carlos Tomada se mudó a México para hacerse cargo de la representación diplomática argentina en el país gobernado por un aliado, Andrés Manuel López Obrador.

La casualidad, y los contactos compartidos, hicieron que días atrás Tomada compartiera un acto en el Senado mexicano con su antecesor en la embajada, el dirigente macrista Ezequiel Sabor, hoy jefe de gabinete del gobierno municipal de Campana, quien además fue secretario de Trabajo de Cambiemos en la Nación y la Ciudad.

El acto compartido fue un reconocimiento de la Cámara alta azteca a Viviana Corcuera, quien junto a su marido fueron precursores del paddle en ese país. Como la organización los sentó uno al lado de otro, Tomada y Sabor (quien recibió al presidente Alberto Fernández cuando llegó a México, ya como presidente electo, en noviembre de 2019), intercambiaron algunas palabras respetuosas.

“No hablaron de política”, comentaron testigos del encuentro, pese al pasado en común de la dupla, sin más comentarios.