Las modificaciones en el impuesto acordadas por Gobierno y CGT obtuvieron ayer el voto afirmativo de los cinco representantes locales presentes en Cámara baja nacional, sobre un total de siete. Aportaron a los 167 reunidos por Cambiemos para la sanción.
a ley de modificaciones en el Impuesto a las Ganancias aprobadas ayer por Cámara de Diputados de la Nación contó con el apoyo de todos los legisladores correntinos presentes en el recinto. Los tres peronistas tanto como sus dos comprovincianos de Encuentro por Corrientes (ECO) votaron con la mayoría el proyecto acordado entre Gobierno y CGT. Plenario tenso, con roces, chicanas y perlas.
Los peronistas Carlos Rubín y Oscar Macías, diputados electos por el Frente para la Victoria (FPV) correntino en las últimas legislativas nacionales y luego reagrupados en el bloque “Justicialista” liderado por Diego Bossio – espacio intermedio entre la ortodoxia y la vanguardia del partido homónimo en Cámara baja – levantaron la mano por la afirmativa durante la votación “nominal” de la iniciativa impulsada por el Ejecutivo Nacional y el “triunvirato” de secretarios generales de la Confederación General del Trabajo (CGT), que obtuvo media sanción del Senado el pasado martes 6 de este mes.
Su colega Araceli Ferreyra, en tanto, formó parte del reducido grupo de diputados kirchneristas “orgánicos” que hizo caso omiso al exhorto del jefe de bloque FPV Héctor Recalde, para el retiro de representantes de dicha fuerza del recinto antes del inicio del plenario, como muestra de “disconformidad” con una propuesta que consideró “una ley peor” que la promovida en forma conjunta por su bancada y el líder del Frente Renovador (Sergio) Massa.
Al igual que Rubín, Macías y Ferreyra, también hicieron lo propio el radical Julián Dindart y María de las Mercedes Semhan de Barberán de Proyecto Corrientes, ambos representantes de ECO en Diputados de la Nación y aliados del frente gobernante Cambiemos.
Unos y otros adoptaron una misma postura frente a una iniciativa, avalada por la representación gremial, que significó un “alivio” a las arcas provinciales si se la compara con la del FR-FPV. Según precisó días atrás el ministro de Hacienda y Finanzas, José Enrique Vaz Torres, el proyecto original de Cambiemos implicaba una merma de ingresos coparticipables cercana a los $240 millones anuales, fácilmente digerible dentro del esquema compensatorio acorde con Nación y previsto en ese proyecto. La de Massa, en tanto, significaba una pérdida anual de $1.800 millones para Corrientes y efectos “catastróficos” en sus finanzas.
En ese marco, Nación planteó una postura equidistante, y al menos
“negociable” para las autoridades locales, actualmente imbuidas en dicha instancia con funcionarios del Gabinete nacional.
Ausencias
El radical Gustavo Valdés y el “camporista” José “Pitín” Ruiz Aragón fueron los diputados nacionales correntinos ausentes durante la votación de cambios en Ganancias.
En diálogo con época, Valdés explicó que asistió al plenario del Consejo de la Magistratura respaldado por la jefatura de bloque una vez asegurado el número. Aragón, por su parte, esgrimió problemas familiares como impedimento, aunque señaló a este diario que “en caso de estar, me hubiera retirado con el resto del bloque”.
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Una ley “equidistante” y consensuada
El proyecto transformado en ley ayer por Cámara de Diputados obtuvo 167 votos positivos, cinco negativos – de los bloques de izquierda – y tres abstenciones, entre las que se contaban los diputados por San Luis.
El oficialismo provincial mira estas modificaciones como en el centro de una disputa. Aliviana la merma de ingresos que habría generado la propuesta de Massa, pero continúa por encima de los $240 millones que cedería al año Corrientes en caso de regir la impulsada originalmente por Cambiemos.
En concreto, la reforma al impuesto a las Ganancias eleva el mínimo no imponible de 37.000 pesos brutos (30.500 de bolsillo) para casados con dos hijos, y a 27.941 pesos brutos (23.200 de bolsillo) para solteros, con el objetivo de aliviar el costo de los trabajadores que seguirán alcanzados por este gravamen.
Hay un aumento que tendrá un impacto significativo, entre 167% y 300%. También se modifican las alícuotas para los trabajadores que ingresan por primera vez a Ganancias: será de 5% (hoy es de 9%).
En cuanto al aguinaldo se incluyó una forma de liquidar el impuesto para que el trabajador sufra la misma percepción todos los meses. Esto provocará que no haya un impacto desmedido en las dos cuotas anuales del aguinaldo.
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Retirada opositora
El bloque FPV se retiró del recinto de Diputados antes del inicio del plenario que transformó en ley los cambios en Ganancias.
“En materia de escalas (del tributo), este proyecto es mucho peor que el original que presentó el Poder Ejecutivo. El Gobierno dice que dejarán de tributar el impuesto unos 400.000 trabajadores pero con las paritarias del año que viene, unos 2 millones de asalariados pagarán el impuesto”, explicó al respecto el diputado y ex ministro de Economía del kirchnerismo, Axel Kicillof.
Por su parte, el jefe de bloque “K”, Héctor Recalde, advirtió que “el peso del déficit recaerá en los trabajadores, jubilados y autónomos, y no se tocarán los intereses de la patria financiera y de los agroexportadores. No queremos ser cómplices de esta discusión”, enfatizó.
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