Con la polarización entre macrismo y kirchnerismo confirmada por las urnas en las PASO, Sergio Massa se esfuerza en explorar alternativas que rompan ese escenario electoral. Ya tomada la decisión de correr a Margarita Stolbizer de la campaña para rascar la olla en busca de votos peronistas, ahora desafió a sus rivales en la pelea por el ingreso al Senado nacional con un debate televisivo. “Si tiene coraje, los esperamos”, soltó.

El timing organizativo pecó de optimista. Al hotel Meliá, en el microcentro porteño, llegó un puñado de medios para ver cuál era el mensaje que el candidato a senador por la alianza 1 País tenía para soltar a 12 días de las elecciones. Ese mensaje era una carta, que se repartió entre los asistentes. Una carta fechada este mismo martes y firmada por Francisco Morea, rector de la Universidad Nacional de Mar del Plata, en la cual ofrecía esa casa de estudios como sede de un debate de candidato el miércoles 18, a las 20 horas.

La misiva aclaraba que la modalidad propuesta era “bajo el formato Argentina Debate”, aunque dejaba abierta la posibilidad de que los invitados puedan “aportar las condiciones y reglas a la que deberá ajustarse este importante encuentro de ideas”.

“Quiero invitar al resto de los candidatos a que reflexionen”, sostuvo Massa, y convocó a la posibilidad de escuchar preguntas de periodistas y aprovechar las “preguntas y repreguntas entre candidatos”.

Desde Unidad Ciudadana aclararon a Letra P que, hasta bien caída la noche del martes, la invitación a su candidata, la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner, aún no había sido cursada. 20 días atrás, fue la propia Cristina la que había deslizado la posibilidad de ir todos los candidatos a senador a un debate público. Requirió, eso sí, que se haga en universidades públicas. Lo mismo sugirió, aunque con menos ahínco, el candidato de Cambiemos, Esteban Bullrich. Aunque la intención del candidato macrista sería que el debate se concrete bajo el paraguas que ofrece el Grupo Clarín, el canal de noticias TN.

Estamos convencidos de que la pobreza sólo se gana con trabajo. #YoQuieroDebate para saber que proponen los otros espacios políticos. pic.twitter.com/U76BKXHDcg

— Sergio Massa (@SergioMassa) 10 de octubre de 2017

“No se vota presidente”, insistió, “sino el Congreso que va a tener que decidir temas muy importantes”. Y ahí soltó su catarata de temas. “Sería bueno preguntarle a la candidata de Unidad Ciudadana si sigue pensando que la inseguridad es una sensación –aunque en realidad lo dijo Aníbal Fernández- o al de Cambiemos si el crecimiento del delito en la provincia de Buenos Aires es por el fracaso de la lucha contra las mafias”.

También pidió que las fuerzas políticas se expresen a favor del 82% móvil para jubilados y recordó que Cristina vetó esa ley siendo presidenta, mientras que el macrismo, que votó a favor en el Congreso con el recordado Grupo A, ahora que es gobierno no lo aplica.

La conferencia de Massa arrancó 50 minutos más tarde de la hora acordada. Apenas ocupó el atril, pidió disculpas por las demoras –se extendió el tiempo esperando la llegada de mayor cantidad de medios- y aclaró que Stolbizer no estaba porque todavía no había llegado. Cuando llegó la líder de GEN, ya promediando el anuncio, declinó la propuesta de sumarse al panel que secundaba a Massa en el escenario. Recién terminó subiendo cuando, tras varios guiños de Graciela Camaño y otros oficiales de campaña del massismo, los gestos pasaron de simpáticos a presurosos. 

Ya cerrado el evento, Massa –rápido de reflejo con la explotación mediática- notó que no habían hecho la foto de rigor. La música de fondo empezaba a subir el volumen cuando el ex jefe de Gabinete se reubicó en el atril y lanzó un chiste para Stolbizer: “¿Y que hoy gane Argentina, no Marga?”. Ya con la atención de su socia electoral, sumó a la foto a su primer candidato a diputado nacional, Felipe Solá. En el medio de los tres, la carta de la Universidad Nacional de Mar del Plata. Tal vez la última carta del mazo en la carrera de Massa hacia el 22 de octubre.