Las sanciones que Urbaser, adjudicataria del servicio de recogida de residuos urbanos y limpieza viaria, está poniendo a sus trabajadores tras vigilarse el cumplimiento del contrato por la empresa Albera Medio Ambiente «rozan la ilegalidad» y son «recurribles». Al menos esa es la opinión de algunos sindicatos con representación en el comité de empresa del Ayuntamiento de Burgos, que defiende los intereses del personal laboral.

Según denunció este periódico, citando fuentes del comité de empresa de Urbaser, las sanciones, muchas de ellas graves o muy graves, están acarreando suspensiones de empleo y sueldo que en algunos casos llegan a los 20 días como consecuencia de darse un «golpe involuntario» contra una farola, dar marcha atrás con el camión o aceptar una bebida de un hostelero en las fiestas. Por el contrario, la empresa supervisora considera que el servicio se está prestando correctamente.

Ángel Citores, de CCOO, recuerda que para abrir un expediente Urbaser debe tener «unas pruebas». «Muchos de estos expedientes pueden llegar al juzgado y acabarán quedándose en nada. En mi opinión, todas estas sanciones se deben recurrir. Las relaciones laborales pertenecen a su propia empresa. Los vigilantes deben estar para ver si se cumple con la recogida de los residuos no de lo que hace el personal. Muy mal tienen que estar las relaciones laborales en esa empresa para que se utilice a terceros para la vigilancia de su personal. Las empresas tienen órganos negociadores para eso no suceda».