El arzobispo de la arquidiócesis de Resistencia, Fabriciano Sigampa, realizó el oficio religioso en el acto de homenaje por el "Día del Veterano y de los Caídos en la Guerra de Malvinas", y en ese contexto, oró por la vida de los hermanos que perdieron su vida en la guerra de 1982.
"Concede Señor el descanso eterno y brille para ellos, la luz que no tiene fin", dijo el arzobispo en su oración por los hermanos que ofrendaron su vida y pidió que venga en su ayuda el santo de Dios, los ángeles del Señor, reciban sus almas y lo lleven a la presencia del Altísimo.
En el inicio del acto, monseñor Sigampa emitió una oración por los hermanos que ofrendaron su vida en la guerra de 1982 "aquí quedamos nosotros, que tenemos que ofrendar nuestras vidas también". Leyó además un texto del Concilio Vaticano segundo, escrito hace 50 años pero que "permanece muy vigente hoy".
"Debemos procurar la educación cívica y política que en nuestros días es particularmente necesario en el conjunto del pueblo; quien vaya a cumplir esa misión preparase para ella y no reúsen dedicarse a la misma dejando el propio interés y las ventajas materiales, luchen contra la injusticia y la presión, la intolerancia y absolutismo, obren con integridad y prudencia", expresó.
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