Una lluvia persistente, aunque en ningún punto de la provincia torrencial, volvió a mojar ayer casi todo el mapa cordobés. Para hoy, los pronósticos anticipan un cuadro similar.

El agua no provocó nuevos problemas graves, aunque en los sitios que padecieron recientes inundaciones generó preocupación. En esos casos, retrasa las tareas de reparaciones.

En el área de Sierras Chicas, con los 30 milímetros promedio caídos ayer, la suma total en lo que va del año ya supera los 890, cifra equivalente al promedio histórico anual de 904 milímetros para esta región, según el observador meteorológico Mario Navarro. A marzo le quedan varios días y para hoy se aguardan nuevas lluvias. Según el especialista, con estación propia en Salsipuedes, el récord de lluvias anual en esa zona es de 1.508 milímetros en el año 1992. Con sólo sostener de ahora a diciembre los registros normales, se superaría ese récord.

Durante la última década preocupó a esta zona la falta de agua, incluso con restricciones en el servicio de la potable. Se hizo habitual escuchar que iban desapareciendo las vertientes que alimentaban los arroyos de la región. Ahora, las vertientes afloran hasta en sitios donde se creían inexistentes y suman inconvenientes a los vecinos.

El trágico aluvión del 15 de febrero destruyó en esta región más de 250 casas y causó daños a otras tantas además de roturas en calles, rutas, puentes y servicios públicos.

A medida que transcurren los días, se advierten además otras secuelas, emergentes de los daños iniciales, como pérdida de fuentes de trabajo y recesión en la actividad comercial, dificultades de conexión por falta de arreglos en calles y puentes, y la permanencia aún de familias evacuadas y otras con necesidades que no terminan de cubrir a pesar de los planes de asistencia.

Aunque los registros de las últimas lluvias no son caudalosos, impiden que la maquinaria de gran porte pueda concluir los trabajos de limpieza de arroyos, la reparación de puentes y vados y la normalización de los servicios de recolección de basura, alumbrado y telefonía.

“Estas lluvias no hacen más que complicar todo el esfuerzo que venimos realizando para tratar de restablecer la normalidad en nuestras comunidades. Las calles que reparamos apenas duran unos días, o menos, y las más de las veces se empantanan las máquinas tratando de arreglarlas”, comentó el intendente de La Granja, Carlos Ambrosich.

Sin turismo de “finde”

Mientras todas las regiones turísticas de Córdoba muestran conformidad con el movimiento observado durante el fin de semana largo que culminó ayer, el área de Sierras Chicas quedó afuera esta vez: con los daños del aluvión de febrero aún visibles, casi ni registró actividad en ese rubro.

Festival por Idiazábal

Se realizó ayer en el anfiteatro de Villa María un festival solidario, organizado por el municipio, para recolectar donaciones para su vecina localidad de Idiazábal, muy afectada por las inundaciones. Actuaron Banda XXI, Negro Videla, Damián Córdoba y otros.