María Servini de Cubría se apartó de un caso en el que era investigado Mauricio Macri y comenzó a perder fuerza la embestida contra la mesa judicial del ex presidente.

La jueza federal se apartó de una causa en la que investigaba a Macri y a altos funcionarios de su Gobierno que eran acusados de haber presionado a Cristóbal López para que vendiera el Grupo Indalo. Además del ex presidente, uno de los principales apuntados era Fabián "Pepín" Rodríguez Simón, uno de los integrantes de la mesa judicial.

Servini se apartó del caso luego de que la semana pasada el periodista Tomás Méndez de C5N, justamente del Grupo Indalo, se refiriera de manera agraviante contra ella durante la emisión de un informe sobre la causa de Indalo.

"Servini deje de romper las pelotas ya, jubílese ¿Cuántos años tiene Servini? ¿Ama tanto el laburo, Servini? Póngase una jardinería, póngase un vivero si quiere laburar. Servini, en serio, por primera vez en la vida, a los ochenta y pico de años, póngase un vivero a ver si labura", dijo Méndez.

La jueza dejó la causa mediante un escrito en el que se dijo víctima de la "violencia moral". "El motivo principal de mi agravio consiste en los insultos proferidos por el periodista en cuestión en un canal de televisión cuyos propietarios son parte de esta causa", indicó la jueza.

Servini es jueza federal hace 30 años y soportó críticas en los medios desde siempre -la sátira que hizo de ella Tato Bores es la más recordada-, por lo que su movimiento fue interpretado en el kirchnerismo como un mensaje. Creen que es la primera reacción fuerte de Comodoro Py luego de que el Senado diera media sanción al proyecto de reforma judicial enviado por el Gobierno.