El proyecto de llamado a licitación para abrir una nueva celda de disposición de residuos domiciliarios en el vertedero ubicado sobre la ruta 40 podría ser aprobado esta semana por el Concejo Municipal de Bariloche si se cumplen la expectativas del Ejecutivo, que trabaja desde hace semanas para conseguir los votos.

La sesión para darle tratamiento ya fue postergada un par de veces por “falta de otros temas”, pero se realizaría el próximo jueves. Lo que no está confirmado todavía es el lugar, porque el activo grupo de vecinos que reclama desde hace tiempo el cierre del vertedero pugna por sacar a los concejales de su sede natural en el Centro Cívico y llevarlos a sesionar en algún recinto de la Pampa de Huenuleo, con el fin de garantizar la “participación masiva” de los directamente afectados.

Hace casi un mes lo pidieron mediante una nota formal y sugirieron locaciones como el gimnasio Newenche, en el barrio El Frutillar, o alguna escuela de la zona. Pero la decisión final depende de lo que resuelva la comisión Legislativa, que se reúne el miércoles.

La concejal Julieta Wallace (Frente de Todos) dijo que la sesión ordinaria “iba a ser el jueves 23, pero pasó al 30, porque había pocos temas”. Señaló que la presidente del Concejo, Natalia Almonacid (JSRN), se mostró “permeable” para cumplir con el pedido de los vecinos y trasladar la sesión al Alto de Bariloche, aunque “sujeto a disponibilidad” de un lugar apto.

Wallace señaló que “si todo se combina” la sesión será en unos pocos días y en la zona cerca al basural, donde existe un fuerte rechazo a la continuidad de ese sitio de disposición final. Aunque si hay pocos proyectos podría postergarse otra vez.

El Concejo obligó a precipitar las definiciones cuando aprobó por unanimidad hace cuatro meses una ordenanza que obliga a cerrar el vertedero el próximo 4 de diciembre. El intendente Gustavo Gennuso dijo que es imposible cumplir en esos plazos porque no hay lugar adonde mudarlo y el único proyecto viable sería reemplazarlo por un basurero regional, que necesita el compromiso de la provincia y también plazos mayores.

Por eso decidió implementar una transición con un plan de mejoras que incluye la apertura de una nueva celda en el predio ya existente, con un sistema de tratamiento más prolijo y menos expuesto a los incendios. Dispuso con ese fin una partida presupuestaria de 723 millones de pesos.

La demora del tratamiento del pliego en el Concejo torna cada vez más incierta la posibilidad del gobierno de mostrar resultados tangibles antes de las próximas elecciones en un tema que tiene alta sensibilidad para una amplia porción de la comunidad.

En su último mensaje ante los concejales, al abrir el año legislativo, Gennuso casi no habló del tema, pero un grupo de mujeres se manifestó con banderas en la puerta de la biblioteca Sarmiento (donde se realizó el acto) para recordarle que se trata de una demanda prioritaria, que hay “una cuestión de salud pública” de por medio y que “es una burla” que el Ejecutivo no avance con el cierre.

El proyecto de pliego de licitación obtuvo dictamen de comisión hace dos semanas, con el único voto positivo del oficialismo. Wallace y el concejal Pablo Chamatrópulos (Podemos) se expresaron en contra. Otros bloques se abstuvieron o se retiraron y definirían su postura en la sesión.