El último viernes 1 de septiembre se cumplió un año del intento de asesinato a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, un evento que marcó a fuego el escenario político y social en todo el país.

En este marco, el intendente de Ensenada, Mario Secco, analizó los coletazos de lo ocurrido 365 días después y en diálogo con AM750, declaró: “Cuando vimos esas imágenes quedamos en shock. ¿Qué hubiese pasado del pueblo argentino sin Cristina?”.

Y recordó: “Después de esos minutos en los que quedamos helados, empezamos a llamarnos para armar un flor de quilombo, para organizar a todas las vertientes de la militancia kirchnerista. Y al día siguiente, la Plaza de Mayo explotó para repudiar semejante barbaridad”.

En esa línea, el jefe comunal de Ensenada afirmó que, a un año de lo ocurrido, “hubo un encubrimiento asqueroso a nivel nacional”. “Quedó demostrado lo que son capaces de encubrir estos tipos con sus jueces, con sus fiscales, con los altos mandos de la policía”, declaró.

“Estamos hablando de la vicepresidenta, la persona más querida del país. Y durante un año vimos como encubrieron y taparon semejante barbaridad. Le hacen un gran daño a la democracia estos tipos”, insistió.

Y completó: “Cuando habla del bastón del mariscal, Cristina nos está diciendo que nos hagamos cargo de lo que viene. Muchos se hacen cargo, pero muchos se hacen los boludos”.

LO QUE DEJARON LAS PASO

En tanto, Secco analizó los resultados de las elecciones del pasado 13 de agosto, que exhibieron como gran vencedor al libertario Javier Milei. “Yo entiendo que Massa no es Cristina. Pero yo te pongo el personaje de Milei, esta mujer Bullrich y te pongo a Massa...no te dejo opciones”, consideró.

“Estamos yendo casa por casa a buscar a los miles que no fueron a votar. Todos tenemos que hacer eso, empujar para ir al balotaje y que ahí el pueblo argentino decida entre dos argentinas distintas que se ponen en juego”, dijo Secco y consideró que en la contienda electoral se disputarán dos modelos de país: “La Argentina de la flexibilización laboral, la que va a hacer mierda los hospitales, la argentina sectaria”, por un lado, “y de la justicia social y la redistribución de la riqueza”, por el otro.

“Estamos competitivos. Muchos compañeros se están poniendo las pilas para empujar el carro y llegar al balotaje”, concluyó.