Cuando apenas van seis meses de un nuevo mandato, el tercero, Carlos Selva afirmó no tener aspiraciones personales, solo “terminar esta gestión para lo cual tuvimos el respaldo popular de llevar adelante un tercer mandato que no ha sido fácil y con orgullo de ser intendente de mi ciudad, Mercedes”. Por otra parte, y al ser consultado sobre una futura llegada a la legislatura provincial, consideró que “es un camino largo por andar” y que “los hombres políticos siempre tenemos aspiraciones, siempre”, recalcó. En ese sentido, sostuvo que “en lo que uno ha aprendido de tener la representación en el cargo que fuere tiene que ver con análisis no solo personal sino de mi ciudad y mi zona y a veces se mezclan las cosas”. Mercedes está al límite de la Segunda Sección electoral, de la Tercera y Cuarta, y “más allá de la especulación de la lista de legisladores lo real es que nuestra idiosincrasia tiene que ver con municipios de San Andrés de Giles, Capitán Sarmiento, Suipacha, Lobos, Chivilcoy o Alberti, con quienes compartimos cosas de organización”, señaló. “Y si uno tuviera otra responsabilidad, tendría que trabajar con otra visión del interior, de región”, puntualizó al respecto.

Por otra parte, sentó nuevamente su apoyo al gobernador bonaerense, a quien lo ve como candidato a presidente, ya que “es uno de los hombres fuertes del peronismo para llevar adelante cualquier desafío”.

Pero, aclaró “solo nunca nadie ha podido gobernar” y el gobernador Daniel Scioli “es uno de los mayores candidatos y nos obliga a todos a trabajar con entusiasmo y responsabilidad en el cambio lógico que se tiene que producir”.

En ese sentido remarcó que “es totalmente razonable que en un estado de derecho y un sistema democrático uno diga lo que pretende ser”. Para el intendente mercedino “la discusión sería si se trabaja solamente para eso”, porque “la gestión si funciona con fines electoralistas está mal, cosa que no hace el gobernador, y hace menos política que lo que muchos quisiéramos”.

En ese contexto aseveró al respecto que “acá viene toda una cacería de brujas y el gobernador ha sido muy claro”.